El concello de A Guarda se queda sin interventora

A Guarda

La gestión del concello de A Guarda queda prácticamente paralizada desde este jueves, primer día en el que no cuentan con interventora, que deja el ayuntamiento tras recibir el visto bueno a su solicitud de traslado a Arzúa.

"Hemos hecho las cuestiones necesarias para tirar de la bolsa de interinos que tenemos para poder continuar la labor de auditoría y elevar los presupuestos a pleno en cuanto los tengamos. Pero bueno, no deja de ser un retraso absolutamente y un perjuicio para toda la ciudadanía", ha señalado el alcalde Roberto Carrero en una entrevista en Hoy por Hoy Baixo Miño, en la que también señaló que el recambio puede tardar un mes como mínimo. El interventor es un profesional fundamental en los ayuntamientos, ya que se encarga del control y fiscalización interna de la gestión de tipo económico y financiera, entre ellos la intervención de las inversiones y los pagos, además de la aplicación de las diferentes subvenciones.

Tres opciones para el CIS

El regidor guardés también se ha referido a otros de actualidad como a la búsqueda de terrenos para la construcción del futuro CIS (Centro Integral de Salud) del municipio. "Barajamos tres terrenos, de los cuales estamos ahora reuniéndonos con los propietarios para tratar de hacer o bien una oferta económica o bien empezar algún tipo de solución que fuese más económica para las propias arcas municipales. También se le han presentado los terrenos a los responsables del centro de salud de A Guarda y las opciones que hemos presentado les convencen", añadió.

Respecto a la comunicación marítima con Caminha, el próximo 18 de septiembre está prevista el estreno del renovado pantalán de A Pasaxe tras su arreglo, aunque eso no va a suponer el regreso del tradicional ferry. "Desde la AECT Río Miño se realizó un estudio de posibles conexiones viables para mantener una conexión permanente entre ambos municipales. De las tres opciones que se barajaban, hemos optado por la más viable a un plazo más corto, que sería volver a realizar las travesías a través del ferry Boat. En Caminha están estudiando la viabilidad de la actual embarcación, que tiene una antigüedad de 30 años y, por tanto, está bastante viejo y deteriorado. Además tenemos un serio problema en ambas riberas, que es el dragado del río. Llevamos nueve años sin efectuarlo y el calado no es suficiente para que actualmente el ferry pueda realizar la travesía. Hemos ya hecho consultas y estamos en ello para que , de alguna manera, el propio Estado español pueda hacer un estudio de viabilidad y posteriormente realizar el dragado", explicó.