Ferrol no cierra la puerta a recuperar en un futuro los restos arqueológicos de San Francisco
El alcalde asegura que si la corporación municipal y los vecinos deciden explorar esa opción se podría valorar. Eso sí, ha puntualizado que debe contar con un proyecto y con financiación

La obra avanza con la colocación de las nuevas aceras

Ferrol
El gobierno de Ferrol no cierra la puerta a recuperar los restos arqueológicos de la calle San Francisco. El alcalde de la ciudad, José Manuel Rey Varela, ha asegurado este lunes que si la corporación municipal y los vecinos deciden explorar esa opción se podría valorar. El regidor ha puntualizado que esta actuación debe contar con un proyecto y con financiación, algo que por momento no existe, según ha remarcado.
Preguntado por si se podría actuar en la zona, al financiarse la reurbanización de San Francisco con fondos europeos, Rey Varela ha señalado que sería necesario consultar con el órgano de gestión de los fondos y pedir los permisos pertinentes y ha añadido que "entendemos que sendo para un obxectivo de conservación patrimonial non debería de ter ningún problema”.
Además, este lunes se ha celebrado una junta de portavoces en la que el gobierno local ha entregado toda la documentación y los informes sobre los restos arqueológicos. Rey Varela ha explicado que el tapado de esos vestigios no es irreversible, ha especificado que se han protegido, por si en el futuro se quiere realizar una intervención.
Con todo, el regidor ha defendido la necesidad de concluir la obra de reurbanización de la calle antes de finalizar este año para no perder los fondos europeos. Y para avanzar en la intervención, este lunes la Xunta de Goberno Local ha dado luz verde a las obras de emergencia del derribo parcial del edificio del antiguo bar Cobas. Una intervención necesaria para continuar con la reurbanización de la calle, ya que el riesgo de desplome del inmueble impide que la piqueta pueda levantar el pavimento en el último tramo de la vía.
La intención es liberar al edificio de los dos últimos pisos, que se levantaron fuera del planeamiento y acabaron afectando a la estructura. El gobierno calcula que el derribo empezará esta misma semana y los trabajos se prolongarán durante un mes y medio. De los mismos se encargará la empresa Prosema, por un importe de 185.000 euros.




