"El suicidio es una medida drástica a un problema pasajero, es algo que se puede prevenir"

A Coruña

El pasado domingo se conmemoraba el Día Mundial para la Prevención del Suicidio y ponemos la mirada sobre este problema de salud pública que se lleva la vida de una persona cada 40 segundos en el mundo. En términos absolutos, A Coruña es la provincia que más suicidios registra de Galicia, pero más allá de las cifras están las personas y la situación que estamos viviendo en los últimos tiempos y la principal razón por la que queremos tratar el tema es porque se puede prevenir. En Hoy por Hoy A Coruña hablamos con Mercedes Fernández, psicóloga clínica de la unidad de prevención del suicidio.

• ¿De qué manera se trabaja en la unidad de prevención del suicidio? ¿Con qué equipo?

La unidad lleva trabajando poco más de dos años, desde mayo de 2021 y está conformada por una psiquiatra, una enfermera especialista en salud mental y la psicóloga, y

• ¿En cuánto tiempo soléis atender a las personas que os piden ayuda?

La celeridad en este tipo de conductas es fundamental. La unidad atiende a personas que están en riesgo muy alto, son personas, que no piden directamente la entrada en la unidad, sino que vienen derivados de urgencias o de hospitalización psiquiátrica o de unidades de salud mental, donde se ha detectado que ha habido tentativas autolíticas, o bien una ideación de hacerse daño. Se les contacta telefónicamente en 72 horas como máximo desde que recibimos el aviso y se les ve en menos de una semana con una consulta presencial. Se les atiende durante el periodo que necesiten en principio, aunque está pensado para una intervención en crisis de 3 a 6 meses y después, una vez que disminuye el riesgo suicida, se les deriva a los dispositivos convencionales que tenemos.

• ¿Qué es una tentativa autolítica?

La tentativa autolítica es cuando una persona inicia la cadena de acciones, que llevaría al suicidio y si por suerte avisa, o la detecta su familia o su entorno.

• ¿Cuáles son los factores de riesgo?

El factor de riesgo principal es tener antecedentes de otros intentos autolíticos. Otro es el abuso de drogas o de alcohol, porque disminuyen nuestro autocontrol, nuestra auto regulación y pueden propiciar problemas. Tener depresión, trastorno mental grave, una enfermedad física incapacitante o dolorosa e historias traumáticas también pueden ser factores de riesgo. Las personas que llegan a esta situación quiere cambiar su vida. Todos podemos llegar a esta situación, y pueden aparecer estas ideas, lo que sienten es que es una solución, una solución drástica a un problema pasajero.

• ¿Cuáles son las señales de advertencia?

Las señales de advertencia que podemos ver normalmente son cambios que nos llamen la atención en la conducta de la persona, una persona más aislada, puede llegar a hacer preparativos, empieza a regalar cosas, o incluso que lo cuenta de forma más o menos directa, con señales con frases como 'no merece la pena vivir'. En este caso nunca tenemos que eludir la conversación, podemos hacer preguntas como: ¿a qué te refieres? ¿qué quieres decir? ¿estás triste? ¿estás pensando en hacerte daño?. Es importante estar presente y nunca quitarle importancia con frases tipo, no es para tanto, yo esto peor o ya se te pasará.

• ¿Y si se nos pasa a nosotros por la cabeza?

Debemos protegernos. Vamos a intentar evitar el aislamiento, intentar hablar con alguna persona o buscar ayuda. Está activo desde hace un año el 024, un teléfono que ha tenido una acogida estupenda, al que uno puede llamar porque tiene ideas suicidas. Es un sitio en el que hay personas que cogen el teléfono y saben que van a hablar de esto, no te van a preguntar los datos y te van a atender el tiempo que necesites. Si estamos en más riesgo, con una situación autolítica, tenemos otros dispositivos más expeditivos, el 061, o el 112. Si alguien tiene una idea suicida franca, y nota que está en riesgo y que no se puede contener es una urgencia médica igual que una sensación de ataque al corazón o cualquier otra cosa, y en este caso debemos ir a urgencias.

• El suicidio es la segunda causa de muerte en niños y jóvenes de 10 a 24 años. ¿Esto a qué se debe?

Todavía no sabemos muy bien antes debido, yo creo que hay que investigar más, hay que saber por qué se muere la gente. Hay que hacer colaboraciones con la Universidad y averiguar qué está ocurriendo. En los institutos y en los colegios se han puesto en marcha actuaciones. Ahora mismo hay una derivación a servicios de salud mental rápida si se detecta conductas suicidas entre los jóvenes.

• ¿Es la franja que más preocupa?

La franja que más preocupa en Galicia, según los datos del IMELGA del año pasado, son las personas de mediana edad y ancianos. El 39% de las personas que murieron en Galicia eran entre 41 y 60. Años y a partir de 60 teníamos el 45%. Son las franjas de edad más preocupantes.

• ¿La salud mental es la tarea pendiente de la sanidad pública?

Yo creo que sigue siendo la tarea pendiente de la sociedad, no de la sanidad pública. Yo no lo considero solo un problema sanitario. Es un problema social de fracaso como sociedad, a lo mejor no estamos poniendo los medios para paliarlo. Los accidentes de tráfico se consiguieron disminuir con muchísima inversión, con muchísimas campañas y con muchísimos recursos. En el tema de salud mental, el haber puesto en marcha unidades en todas las ciudades importantes de Galicia es importante pero necesitamos que aumente la dotación en las unidades convencionales.

• ¿De qué manera podemos ayudar los medios de comunicación?

Prevención. Hay que hablar de esto abiertamente, hablar de que cualquiera puede encontrarse mal en determinado momento y que tiene que solicitar ayuda. Mencionar los dispositivos que hay, los lugares a los que se puede acudir, los teléfonos a los que se puede llamar y normalizarlo. Sin dar datos que no vayan a ayudar, sino centrándose en las personas que sí que lo han superado o en los recursos existentes.