E. Méndez: “Damos a coñecer o resto físico do Homo erectus máis antigo do rexistro mundial”
La investigación, coliderada desde la UVigo, explica la facilidad con la que se expandieron las primeras formas humanas por Eurasia
El arqueólogo de la UVigo, Eduardo Méndez
Ourense
Una investigación, coliderada por Eduardo Méndez (UVigo), altera la cronología de la evolución humana con la que se trabajaba hasta el momento.
Así, si hasta ahora se consideraba que la fecha de aparición de la primera forma de homínido con características `plenamente´ humanas (Homo erectus) se remontaba a 1,8 millones de años atrás y se ubicaba en África, los resultados de la investigación publicada en la revista Science adelantan el acontecimiento y arrojan pistas sobre la expansión de la especie.
De esta manera, los resultados de la investigación en la que participó el profesor Eduardo Méndez Quintas, arqueólogo vinculado al Grupo de Estudos de Arqueoloxía, Antigüidade e Territorio (GEAAT) de la Universidade de Vigo, ha adelantado al aparición del Homo erectus a hace 2,06 millones de años suponiendo el hallazgo "un vuelco en el panorama de la evolución humana a nivel mundial".
Una conclusión que pudo realizarse a partir del análisis del fragmento de mandíbula infantil localizada hace años en Etiopía “cando normalmente a evolución humana asóciase ao val do Rift” afirma Méndez que explica que “esas primeiras formas humanas que abandonan África non saen do fondo do Rift, senón do altiplano etíope. É dicir, houbo outros entornos xeográficos máis parecidos aos que se van atopar en Europa e de aí a facilidade para expandirse”.
También los resultados de la investigación adelantan la fecha de aparición de las herramientas de piedra que empezaron a utilizar los Homo erectus africanos. Tecnología achelense que se empezaría a fabricar hacia los 1, 95 millones de años suponiendo un adelanto de casi 300.000 años en la aparición “da tecnoloxía a escala mundial e nun ámbito xeográfico inesperado”, según explica el propio Méndez.
Los resultados son fruto del trabajo de un equipo internacional multidisciplinar liderado por Eduardo Méndez Quintas (Universidade de Vigo) y Margherita Mussi (Universidade La Sapienza de Roma) que contextualizan así los restos más antiguos conocidos hasta el momento.
