El doble problema con el gol del Celta

Vigo

El Celta tiene un problema con el gol. No solo Aspas. Con los goles marcados y con los goles encajados, también. Hay estadísticas absolutamente preocupantes para un equipo aspirante a la permanencia. Es incompatible con tener una temporada tranquila y no estar en descenso el ser uno de los equipos más goleados de la categoría al haber encajado 18 goles en 10 partidos. Esto hace una media de 1,8 goles por partido. El Celta no ha sido capaz de mantener en ningún partido la portería a cero. En todos ha encajado goles y, en Balaídos, la media tampoco mejora demasiado en casa: los de Rafa Benítez han encajado 10 goles en 6 partidos (1,6 goles encajados por partidos como local).

Si a la media de 1,8 goles de media por partido, le sumas tu pírrica media de goles a favor, con 10 goles en 10 partidos, complica todavía más tu capacidad para poder sumar siquiera un punto en mucho de esos partidos. De esos 10 goles el Celta marcó 5 en Almería y Barcelona. Es decir, en los otros 8 partidos, los de Rafa Benítez solamente anotaron 5: 2 al Getafe y 1 a la Real Sociedad, Alavés y Las Palmas.

Además de no dejar la portería a cero en ninguno de los diez partidos, en casa, el Celta no ha marcado contra Osasuna, Real Madrid, Mallorca y Atlético de Madrid. Un problema que va más allá de la sequía de Iago Aspas o la orfandad del 10 con la marcha de Gabri Veiga con sus 11 goles y cuatro asistencias. El Celta tiene un problema de fiabilidad defensiva que le está lastrando para poder sumar en los partidos. Con Rafa Benítez el Celta es el tercer equipo más goleado con 18 dianas solamente superado por Granada y Almería con 25 y 29 goles encajados respectivamente. Granada y Almería ocupan los otros dos puntos de descenso con los celeste. El siguiente equipo con más goles encajados es el Mallorca con 16 en 10 partidos. El Mallorca está cuarto por la cola. El problema no es solo Aspas. El problema con el gol lo tienes arriba y abajo.