Un pontevedrés encuentra en Australia una moneda de cinco pesetas de la época de Franco

Fernando Santaló llegó a Australia con un visado de trabajo. Antes había pasado por países como Perú, Nueva Zelanda o Irlanda, lugares a los que emigró para buscar mejores oportunidades de trabajo y conocer diferentes culturas. Fue en Irlanda donde, además de encontrar el amor, le surgió la oportunidad de trabajar en Australia. Reconoce que "estábamos moi contentos en Irlanda pero apareceunos a oportunidade de vir a Australia con opcións de quedarnos, e a Australia non se lle pode decir que non".

La semana pasada, mientras disfrutaba de su tiempo libre paseando por Wanda Beach, al sur de Sidney, se encontró una moneda, al cogerla del suelo se percató que era española, de cinco pesetas. Reconoció, en tono de broma, que se asustó al ver la cara de Franco estampada en la moneda "imaxínate o susto ao ver a cara do Caudillo no chan". Se trata de una moneda acuñada en 1957 que se encuentra en perfecto estado de conservación.

Fernando comenta que es habitual para él encontrar monedas de todo tipo mientras pasea por la playa, pero que las más comunes son chinas, coreanas o nepalís. Lo curioso de esta historia es que se trata de una moneda española, con más de 60 años desde su salida a circulación y de la que desconocemos si llegó a Australia en el bolsillo de algún emigrante en el pasado, o si fue una larga travesía de miles de kilómetros a través de los océanos quien la llevó a las arenas de Wanda Beach.

Lo que sí es seguro es que Fernando la va a incluir en su colección particular de monedas del mundo.