El SUP pide explicaciones al CHUAC en el caso del hombre abatido a tiros el día de Navidad en A Coruña
El SUP pide explicaciones de por qué el hombre enfermo psiquiátrico abatido no fue derivado al servicio de Psiquiatría. El Hospital de A Coruña responde que fue atendido con criterio clínico y valoración médica
A Coruña
Siguen las reacciones a la muerte de un hombre abatido a tiros por un policía nacional el día de Navidad en A Coruña mientras se mantiene abierto el procedimiento judicial. El Sindicato Unificado de Policía señala que este hombre era un enfermo psiquiátrico que había protagonizado varios altercados en días previos al día 25 de diciembre y que fue trasladado por la policía al Chuac en dos ocasiones y una al Albergue Padre Rubinos. El SUP pide explicaciones de por qué el Hospital no lo derivó al Servicio de Psiquiatría o determinó su internamiento en el Hospital de Oza, dado el estado en el que se encontraba. La respuesta del Chuac es que "esta persona fue atendida con criterio clínico y valoración médica".
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El SUP se pregunta si el Chuac no derivó a Psiquiatría a Henry Casimiro,de 34 años, al ser residente en otra comunidad autónoma y no tener el Sergas acceso a su expediente médico. En todo caso, puntualiza, el personal facultativo debería tener soluciones a este tipo de situaciones cuando se trata de personas con trastornos psiquiátricos que son un riesgo para la seguridad ciudadana.
El sindicato reclama además que cada policía adscrito a los Grupos de Atención al Ciudadano porte una cámara corporal y no solo la tengan los policías provistos de la pistola táser. Es clave la grabación de las cámaras de seguridad conectadas con las pistola táser utilizadas en un primer momento para intentar inmovilizar al hombre.El SUP califica la labor de los agentes intervinientes en el suceso como "proporcional, oportuna y ajustada al procedimiento en esos casos" y añade que el policía que efectuó los disparos lo hizo en legítima defensa.Las grabaciones y los testimonios de los presentes deberán determinar si el agente implicado habría perdido el equilibrio y quedó a merced del hombre perseguido, como indican los sindicatos policiales.
El fallecido, Henry Casimiro, tenía su domicilio habitual en Torrejón de Ardoz. Según fuentes cercanas a la investigación se encontraba en medio de un brote psicótico. El agente que efectuó los disparos comparecía en días pasados en la inspección de guardia de la Policia nacional para dar cuenta de los hechos. El suceso se produjo sobre las diez de la mañana del día de Navidad en un descampado a la altura de la calle Severo Ochoa. El hombre había huído hasta allí después de golpear con una barra de hierro varios coches, uno de ellos con el conductor dentro, en la Avenida de Arteixo. En todo momento mantuvo una actitud violenta, según la versión policial.
Los hechos se produjeron cuando uno de los policías perdió el equilibrio y cayó al suelo. La versión oficial señala que cuando el agresor iba a golpearlo con la barra de hierro, efectuó dos disparos, uno en una pierna y otro en un órgano vital que le causó la muerte.