Fentanilo en Lugo: una falsa alarma social
La unidad de drogodependencia de Cruz Roja desmiente que traten a personas que consuman este opiáceo de forma ilegal
Fentanilo en Lugo: una falsa alarma social
12:09
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1705414477356/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Lugo
El fentanilo llega a Lugo, pero no de forma ilegal. La publicación en varios medios de comunicación sobre cómo la unidad de drogodependencia de la Cruz Roja de Lugo estaba tratando los primeros casos de adicción a este opiáceo en la provincia ha hecho saltar la polémica, y por eso desde el propio centro han querido matizar estos datos para evitar confusiones.
La psicóloga clínica Mercedes Pedreira y la psiquiatra de la unidad de drogodependencia de la Cruz Roja en Lugo, Gabriela Klepsh, se muestran "sorprendidas y alarmadas" con estas informaciones. Aseguran no tener ningún tipo de constancia de que "haya fentanilo ilegal en la calle, que sepamos la policía no ha incautado ningún tipo de alijo de este fármaco en la provincia", dicen.
El fentanilo es un opiáceo legalizado que se usa para paliar dolores derivados de tratamientos como los oncológicos. Una especie de morfina, más fuerte, que se administra bajo supervisión médica. En los últimos meses esta palabra se ha hecho viral, y es que fueron numerosas publicaciones las realizadas advirtiendo de una peligrosa realidad al otro lado del charco: en Estados Unidos, donde el consumo de este fármaco estaba elevando los índices de mortandad entre los jóvenes.
Más información
Falsos clichés
En la unidad de drogodependencia de la Cruz Roja de Lugo se están atendiendo a más de medio millar de casos relacionados con algún tipo de adicción. Pedreira recalca que "la sociedad se ha quedado con el falso cliché de un toxicómano tirado en la calle con un jeringuilla en el brazo" y el perfil de una persona adicta es amplio y variado. Prácticamente imposible de definir.
Klepsh recuerda que detrás de cada adicción hay una persona. Un ser humano que llega a un punto extremo por una serie de circunstancias y un contexto social o personal no detectado a tiempo. "El foco no debe de ser la droga, el foco debe de ser el motivo que le hace llegar a ese punto", reflexiona.
Compras compulsivas, consumo de estupefacientes o adolescentes enganchados a las pantallas. La cantidad de trastornos o patologías con las que se trabajan desde esta unidad son casi infinitas. Desde adolescentes hasta padres de familia o altos cargos de empresas "todos en algún momento atravesamos épocas complicadas y nunca sabes cuál puede ser el desenlace".
Por eso, Pedreira y Kleps animan a pedir ayuda y a informar de forma responsable desde los medios de comunicación, escapando de sensacionalismos y alarmismo que, lejos de ayudar, dificultan la tarea de profesionales como ellas.
Sara Meijide
Redactora de Radio Lugo