¿Sabes cada cuánto tiempo deberías cambiar el sujetador?

Lugo

El 3 de noviembre de 1914 Mary Phelps-Jacobs patentó el primer diseño de sujetador: Caresse Crosby. Y más de cien años después seguimos sin encontrar unanimidad en la respuesta sobre cada cuánto tiempo deben las mujeres cambiar esta prenda interior.

Lo cierto es que no hay un respuesta única. Podríamos aquí pecar de gallegos y decir que: depende. El docente e investigador experto en salud femenina, Cristian Martín, reconoce que no hay una norma ni una pauta como tal, pero si recomendaciones.

No se hace todos los días, "o al menos no es lo frecuente", pero si ha de lavarse y cambiarse con cierta frecuencia. El experto recomienda "no generalizar en este tipo de afirmaciones y recomendaciones, ya que lo primero es atender a las individualidades de cada persona" para poder dar una cifra.

En primer lugar, el ritmo para cambiar el sujetador estará supeditado al tamaño de los pechos. "Las mujeres con mamas muy grandes, con tendencia a la acumulación de humedad por debajo de ellas o personas con predisposición a hongos en estos pliegues deberán cambiar el sostén todos los días por una cuestión de higiene".

Sin embargo esto no es lo habitual. El experto recuerda que "si no es por ninguna de las cuestiones citadas anteriormente no hay que cambiárselo todos los días, principalmente porque hay que intentar respetar la vida útil de cada prenda de ropa".

Cristian Martín tira de datos para demostrar que un lavado excesivo de prendas de ropa como estas provocan que esa vida útil disminuya. "Hay un ensayo clínico realizado en 2022 que demuestra que los sujetadores deportivos, una vez que se lavaban 25 veces, terminan por perder gran parte de su funcionalidad".

Con los sujetadores de uso diario pasa un poco lo mismo. Si se abusa de su lavado terminarán por ceder y perder sus propiedades antes de tiempo, por lo que hemos de ir valorando los días de puesta y las condiciones en las se ha usado para decidir si lavarlo o no.

Lo que si que recomienda es "aplicar el sentido común". El matrona e investigador subraya la necesidad de prestar atención sobre la cantidad de suciedad que se pueda acumular en la prenda o si existe en ella un mal olor, ambas serán motivo de cambio inmediato.

Tras la viralización en redes sociales de varios videos en los que se les hacía esta pregunta tan personal a 'influencers' o creadoras de contenido muchos han sido los que se han dado cuenta de algo: Apenas existen estudios de investigación sobre algo tan básico para la población femenina.

Cristian Martín reflexiona sobre la falta de perspectiva de género que "nos hace que tengamos estudios sobre cada cuánto cambiar unas zapatillas y no un sujetador". No descarta que detectado este nicho de estudio comiencen a aparecer un mayor número de investigaciones que den respuestas a cuestiones diarias de la población femenina.