El "Ave Fénix" de los montes de Vigo tras los incendios de 2017
En octubre se cumplirán siete años de los fatídicos incendios que arrasaron estas zonas naturales y que hoy en día vuelven a tener vida gracias a las tareas de recuperación y prevención de las Comunidades de Montes
Vigo
Fue un 15 de octubre, un caluroso domingo ya de otoño pero en el que las altas temperaturas y los fuertes vientos, fruto del paso de lo que quedaba del huracán Ophelia, avivaron y extendieron una ola de incendios que azotaban el norte de Portugal y Galicia. La comarca de Vigo fue una de las más afectadas y los vecinos, los primeros en afanarse para sofocar las llamas que se extendían, en muchos casos, por las laderas del monte hacia hacia las casas. Tras casi 24 horas de trabajos de extinción, los incendios se apagaban.
Pero el monte tardó mucho más en sanar. Siete años después recorremos el monte de Fragoselo, en Coruxo, lugar que se vio arrinconado por las llamas. Después del paso del fuego, todo quedó arrasado y hubo que empezar, explica Afonso Rodríguez, vicepresidente de la Comunidad de Montes de Coruxo, desde cero. "O primeiro que se fixo foi o máis urxente que era intentar estabilizar o solos e diminuír, na medida do posible, a erosión", apunta.
Se establecieron medidas de mitigación de la erosión como extender paja, hacer barreras de contención de los arrastres de la erosión. Y, a partir de ahí, acompañar a la naturaleza. "Moitas das especies que temos no monte foron dispersándose elas mesmas, extendéndose de maneira complemente natural, axudadas polo vento e axudadas pola fauna", cuenta Afonso.
Labores de prevención
Desde la comunidad de Montes de Coruxo, trabajan durante todo el año en prevención de incendios, en un territorio como este, en el que siguen abundando especies invasoras como el eucalipto o la acacia negra, susceptibles a grandes fuegos. "En lugares que estaban moi invadidos por estas especies fixemos plantacións cunha diversidade ampla de árbores autóctonas, favorencendo tamén o rexenerado natural e, nos traballo forestais, estamos controlando as invasoras", explica Afonso.
Por desgracia, dicen, los incendios dependen más de los factores meteorológicos que de la prevención. Con todo, tareas como la gestión de biomasa son fundamentales. Del mismo modo, desde las comunidades de Montes de Vigo promueven la diversidad, la recuperación y la restauración del monte autóctono, trabajando a largo plazo para crear un territorio más resistente y resiliente de cara a los grandes incendios.