¿Un verano con playa fluvial?: Así es la propuesta del concello de Lugo para sortear "la intransigencia de la Xunta"
El proyecto para habilitar dos puntos de acceso al baño libre ya ha sido entregado a la CHMS
Lugo
Vaya, vaya, aquí igual si que hay playa. Si la Confederación Hidrográfica acepta el proyecto que ha registrado el concello de Lugo para crear en verano dos puntos de baño de acceso libre, habría que pedirle a 'Los Refrescos' que cambiasen la letra de su ya más que famosa canción. Lo haría con la instalación de dos rampas que facilitasen el acceso al agua desde la zona en la que ya tienen mesas y hamacas instaladas desde hace dos veranos.
La alcaldesa de Lugo, Paula Alvarellos, matiza que “no es propiamente la playa fluvial para la que disponemos de la concesión por 25 años pero no ímos renunciar la que las y los lucenses puedan ejercer su derecho a bañarse con comodidad en el río”.
Viene de trasladar esta mañana a la Confederación Hidrográfica un proyecto para habilitar dos puntos de acceso al baño libre en el Miño con la finalidad de que este verano, "los y las lucenses, puedan aprovechar el río para refrescarse durante los meses de calor y disfrutar del patrimonio natural del municipio de una manera no invasiva y respetuosa con el entorno y con la flora y la fauna que la habita".
Esta alternativa pretende sortear "la intransigencia de la Xunta de Galicia a facilitar la instalación de una playa fluvial en Lugo, que permita entrar en el agua de manera confortable y segura la cualquier persona, independientemente de su edad y de sus necesidades de movilidad, buscamos una propuesta alternativa que cumpla con todos los requerimientos que la Dirección General de Patrimonio Natural impuso en los anteriores informes que emitió, con el objetivo de que en este 2024 la ciudadanía ya no se vea privada de ese derecho que le corresponde y para lo cual el Ayuntamiento lleva hecho tanto un trabajo documental como una inversión pública muy importante”, señaló Alvarellos.
Así, la regidora explicó que este lunes fue presentado en el registro de la CHMS un escrito solicitando instalar dos cuestas de acceso al río con carácter provisional, como mucho tres meses comprendidos en un período entre lo 15 de junio y el 15 de septiembre, destinadas a ser un elemento supletorio que facilite el baño.
El lugar escogido: el mismo en el que el Ayuntamiento dispone de una concesión durante un cuarto de siglo para habilitar la esta zona de recreo y que, en su día, contó ya con el beneplácito de la Xunta por considerarse la ubicación idónea para tal fin, teniendo en cuenta los resultados de una batimetría que avalaba que este emplazamiento cumplía con las mejores condiciones para el baño y el acceso desde la orilla del río.
Desempolvar el material sin estrenar
Desde hace más de un año, el concello de Lugo cuenta con unas plataformas guardadas bajo llave al no contar con la autorización de la Xunta de Galicia al proyecto de elementos móviles que proponía en su día el ejecutivo de Lara Méndez.
La mandataria local avanzó que las rampas tendrán unas dimensiones de 200 cm de ancho por 495 cm de largo cada una. Estarán conformadas por estructuras de aluminio y superficie transitable de PVC que imita la madera, para facilitar su montaje y desmontaje "con la mínima afición al entorno fluvial, mas manteniendo las debidas condiciones de protección tanto en la instalación como en su uso, ya que se podrá transitar por su superficie sin calzado alguno".
La razón de que la superficie transitable sea de PVC y no de madera, obedece a la mayor estabilidad del material frente a variaciones de temperatura y humedad y la mayor resistencia frente a abrasiones, evitando así posibles lesiones por astillas, etc.
“Estas estructuras servirán como punto de acceso al río, a las que, para evitar un mal uso así como proporcionar seguridad a las personas usuarias, dotaremos en la parte superior de una baranda formada por puntales metálicos unidos por cuerda náutica de nailon marítimo (sin putrefacción). Los soportes que le den sustento serán de aluminio, de calidad naval, anticorrosivo y, por lo tanto, cero contaminación”, fue suficiente Alvarellos.
La alcaldesa hizo hincapié en la rigurosidad del trabajo técnico realizado desde el área de Transición Ecológica para elaborar esta memoria, contemplando las indicaciones necesarias para corregir todos aquellos aspectos a los que la Xunta fue aludiendo para sustentar sus informes negativos, en el empeño de rechazar las propuestas municipales.
“Su instalación no implicará la modificación del lecho del Miño, dado que no se realizará el anclaje mediante pilotes o similares y, aunque se colocarán elementos de hormigón en las orillas para lo amarre de las dos cuestas proyectadas, estos serán debidamente retirados cuando se saque la estructura”, añadió Paula Alvarellos.
La previsión es que las cuestas puedan colocarse aprovechando dos zonas de la margen izquierda del río Miño, con pendiente adecuada para su instalación y acomodando a la misma los muertos de hormigón con un mínimo movimiento de tierra que, posteriormente, será repuesto a su estado original.
Además, entre otras precauciones, durante la ejecución de las obras se evitará cualquier enturbiamiento de las aguas fluviales y no se depositarán residuos ni en el cauce ni en sus márgenes, dejando abierta la servidumbre de uso público. Igualmente, tanto el montaje como el desmontaje de las estructuras se realizan básicamente de manera manual y para su transporte no se utilizará maquinaria pesada con la finalidad de que no se altere ni se deteriore de ninguna forma la ribera del río ni se dañe la fauna y flora existente en la zona.
“En febrero, con el acuerdo mayoritario del Pleno de la Corporación, instamos a la Xunta a realizar una prospección en el Miño para que determinara en que lugar resulta viable habilitar esta instalación dentro del área de la ciudad segundo su criterio técnico, habida cuenta de que todos los informes técnicos presentados anteriormente por el Ayuntamiento respaldando el proyecto fueron rechazados. Pasados tres meses sin recibir ninguna contestación, los invitamos de nuevo a mantener una reunión y, una vez más, tendemos a mano para que Ayuntamiento, Junta y Confederación Hidrográfica nos sentemos a tratar este tema.
Sara Meijide
Redactora de Radio Lugo