Estamos más cerca de un cataclismo nuclear de lo que parece, afirma el cuñado de la reina Letizia
Robert Gavin Bonnar estuvo en Pontevedra presentando su último libro, titulado el Cuarto Poder
El mediático cuñado de la Reina Letizia fue nuestro invitado esta semana en Vermú con Ser. Robert Gavin Bonnar es natural de Belfast, en Irlanda del Norte. Es abogado de profesión y escritor de vocación; pero en España se hizo famoso por su boda con Telma Ortiz, hermana de la reina Letizia. De porte británico, con buen dominio del español, aunque con acento típicamente inglés, lo primero que deja claro es que no quiere, ni puede hablar de la Familia Real por los problemas que ello le puede acarrear. Por eso explica que prefiere hablar solo de su trabajo.
Su último proyecto es la presentación de su novela titulada el Cuarto Poder. Esto fue lo que le trajo precisamente a esta provincia, que está además muy relacionada con la misma dado que fue impresa por la editorial pontevedresa Agoeiro. Una ficción de tinte económico que se desarrolla en África, pero en la que incluye datos reales sobre los cambios que se están produciendo en el mundo y vaticinios sobre los que se avecinan. Datos que él dice conocer a través de fuentes internacionales muy diversas; desde los servicios secretos a militares chinos, pasando por conocidos que tiene en varios Gobiernos.
Su principal tesis es que se avecina un cambio de la situación geopolítica mundial, en la que Estados Unidos dejará de ser el país referente. La alternativa serán los llamados Países Emergentes desde África a Asia, con el control de China y Rusia.
El primer paso para este cambio de poder internacional será según Robert Gavin Bonnar, la desaparición del dólar como moneda referencia. Asegura que será sustituida por otra moneda que tendrá con referencia el llamado patrón oro, que el dólar dejó de tener hace años.
Pero este escritor irlandés asegura que ese cambio de poder mundial será traumático y violento, como ocurrió siempre que decae un imperio y surge otro, y por ello vaticina que nos enfrentaremos en los próximos años a una nueva guerra mundial, pero esta vez más violenta que las anteriores, porque será un conflicto Nuclear de consecuencias impredecibles.
En este contexto, Robert Gavin Bonnar sostiene que Europa tendrá un papel irrelevante. Se muestra muy crítico con la actual UE por crear un continente dependiente del exterior, al ceder la defensa a Estados Unidos, la producción a China y la energía a Rusia. Por ello opina que actualmente Europa es ya irrelevante en el contexto mundial.
Anticipo de los cambios mundiales que se avecinan, Robert Gavin Bonnar señala las guerras de Ucrania o el actual conflicto de Palestina, pero también conflictos secundarios que se mantienen en África y Asia y que pasan desapercibidos en Europa.
En este sentido confiere un papel relevante a las nuevas tecnologías y a las Redes Sociales como difusoras de noticias falsas, bulos, y sobre todo por crear un pensamiento muy radicalizado en los ciudadanos.
A pesar de que todos los datos que maneja este escritor irlandés apuntan hacia un cataclismo nuclear mundial, él sostiene que aún es optimista, porque la única salida pacífica está en los ciudadanos. Para ello pide que cada uno nos concienciemos más de lo que está pasando, de las nuevas ideologías ultras que están surgiendo, que seamos más críticos al analizar la realidad y también al votar; y que defendamos los verdaderos valores humanos por encima de los intereses de poder que gobiernan el mundo.
En el ámbito personal, Robert Gavin Bonnar antes de ser la pareja de Telma Ortiz, la hermana de la reina Letizia, estuvo casado con Sharon Corr, la cantante del grupo The Corrs con la que tiene dos hijos y de la que se divorció en 2019. Por su trayectoria profesional es conocido por ser abogado especializado en delitos contra el honor, difamaciones o noticias falsas a través de las Redes Sociales. De hecho, ganó varios juicios contra Facebook o incluso contra medios de comunicación.
También tiene una larga trayectoria de proyectos internacionales, entre ellos la construcción de viviendas sociales en Sudáfrica, lo que le permitió conocer de cerca a Nelson Mandela; la personalidad internacional que más le impactó, según reconoce.