Llega el verano y con él nuevos fenómenos astronómicos
Lugo da la bienvenida entre lluvias a un verano en el que las perseidas se dejarán ver
Las Perseidas tienen su punto más visible a mediados de agosto / Kevin Key / Slworking
Lugo
El calor no ha llegado pero igualmente tenemos que darle la bienvenida al verano porque, aunque no lo parezca, este 20 de junio a las 22:51h empieza el solsticio de verano en el hemisferio norte.
El verano trae alegrías, energía, descanso… pero pocos saben por qué se produce. El investigador del Observatorio Astronómico de la USC, José Ángel Docobo, explica que el solsticio de verano ocurre cuando "el sol pasa por el punto Cáncer, en el que el sol consigue su máxima elevación con respecto al plano ecuador celeste”. Es decir, en este caso, el hemisferio norte está más inclinado hacia el sol, lo que provoca el día con más horas de luz de todo el año.
Pero el inicio del solsticio de verano no implica la llegada del calor, en este caso son polos opuestos. Lo que sí que provoca es que cuando miremos al cielo, podamos observar algo más que la luna, el sol o las estrellas. A partir de ahora, planetas como Saturno y Marte serán más fáciles de ver. También se producirá un eclipse parcial de luna o la denominada 'Luna de Fresa': que es la luna llena que ocurre dos días después del solsticio y con la que los nativos americanos marcaban la temporada de fresas.
La noche reina
Realmente la cita astronómica del verano se produce en la noche del 12 al 13 de agosto: las perseidas o lágrimas de San Lorenzo. Una "lluvia de estrellas" única por el simple hecho de ser en verano, ”cuándo la gente está de vacaciones y puede pasar la noche observándolas y disfrutando de este fenómeno”. Este es el verdadero motivo de su fama, puesto que, según José Ángel Docobo, hay muchas más lluvias de estrellas a lo largo del año. Esto se debe a que la traslación de la Tierra atraviesa zonas donde previamente han pasado cometas que dejaron pequeñas partículas en su camino. Por ello, en el momento en el que nuestro planeta va realizando su movimiento, estas partículas penetran en nuestra atmósfera.
Para poder observar este fenómeno es fundamental atender a la posición de la luna, la fase en la que se encuentra y al tiempo. “La luna este año estará en cuarto creciente, molestará en las primeras horas pero hacia la una de la madrugada estará baja y no afectará al avistamiento de las perseidas”, señala José Ángel Docobo.
Este año, la luna nos permite disfrutar de esta cita veraniega. Esperemos que el tiempo también nos acompañe para disfrutar de la estación más larga del año, que dura 93,66 días.
