Aterrizan en Vigo las primeras niñas y niños saharauis del programa Vacaciones en Paz
Los pequeños que faltan llegarán este sábado a Peinador y serán recibidos por el secretario de Estado de Juventud e Infancia y el presidente de la Xunta
Vigo
Ya han aterrizado en Vigo las primeras niñas y niños saharauis que pasarán las próximas semanas de verano en Galicia con familias de acogida. Entre este viernes y sábado, serán casi 300 los menores procedentes de los campamentos de refugiados de Tinduf, en Argelia, los que llegarán hasta el aeropuerto vigués.
El sábado, llegarán los últimos que faltan para completar en la comunidad gallega el programa de esta año y esta previsto que sean recibidos por el secretario de Estado de Juventud, Rubén Correa y el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda.
Muchos pequeños viajan por primera vez, y lo hacen con el programa Vacaciones en Paz, promovido por la ONG Solidariedade Galega co Pobo Saharaui. En estas jornadas todos los voluntarios de la entidad recogen el fruto de un año de trabajo. Los esperan y les dan la bienvenida en el aeropuerto y, posteriormente, los trasladan a las localidades donde, con sus familias de acogida, pasarán las próximas semanas de veranos, "sus vacaciones en paz".
"Vigo es el primer ayuntamiento de España en número de acogimientos y Galicia es la segunda comunidad sólo por detrás de Andalucía" se enorgullece de esa solidaridad gallega Maite Isla, viguesa y presidenta de SOGAPS y recientemente reconocida con la Medalla Castelao por su labor al frente de la ONG.
Agradece la presidente de la entidad también a las familias de los pequeños por darles la oportunidad de viajar y de escapar de los hasta 50 grados que se alcanzan en esta época estival en los campamentos de la Hamada. "Hay que darles también un agradecimiento especial a las madres saharauis que depositan en nosotros el tesoro más grande que tienen que son sus hijas y sus hijos".
Por delante, semanas de aprendizaje, de descubrimientos y, sobre todo, de disfrutar y pasárselo bien. Y entre aplausos de los pequeños, Maite Isla, pide que vuelvan cada año, pero desde un "Sahara libre".