La Operación Patinete desmantela una organización de Vilanova de Arousa que distribuía cocaína por España y Portugal
La investigación del Servicio de Vigilancia Aduanera en Galicia ha permitido acreditar una veintena de viajes con vehículos caleteados a distintos puntos de la Península
El Servicio de Vigilancia Aduanera ha logrado desarticular una organización de Vilanova de Arousa que distribuía cocaína por España y Portugal. Dos personas, que son el principal investigado y el conductor de un vehículo en el que llevaba 50 kilos de cocaína, ya están en prisión provisional por tráfico de drogas y pertenencia a un grupo criminal. Hay un tercero, localizado en la ciudad sevillana de Lebrija que finalmente no fue detenido, pero sí es investigado por un delito de contrabando de géneros prohibidos.
La investigación a la que Aduanas le ha puesto el nombre de “patinete” se inició hace más de un año al comprobar que el líder, que ya estaba vinculado al mudo del narcotráfico y más concretamente al tráfico por vía marítima, realizaba continuos viajes a distintas localidades españolas.
La sospecha de que pudiese estar de nuevo detrás de algún transporte hizo que los aduaneros siguieran sus pasos más de cerca y es cuando descubren que, junto a una segunda persona, se dedican a la distribución de cocaína por carretera. Utilizaban dos vehículos, uno actuaba de lanzadera y por lo tanto es el que avisaba al segundo, donde iba la droga, si había inconveniente alguno en el camino, para que cambiase la ruta en ese caso. Y en uno de esos viajes, los agentes interceptaron en la autopista AP-9 a uno de estos vehículos en los que llevaban 50 kilos de coca. La mercancía estaba oculta en un habitáculo oculto bajo los dos asientos delanteros y que se descubrió gracias al escáner de contenedores que tiene Aduanas en Vigo. Para acceder a él había que levantar íntegramente parte de la carrocería del coche, según señalan fuentes de la investigación. A este conductor le detuvieron en ese momento, pero el cabecilla se dio a la fuga en una moto, aunque terminó presentándose voluntariamente un mes después.
En el mismo operativo se practicaron cinco registros en domicilios y naves en Vilanova, Lebrija y otra localidad andaluza, El Cuervo. La intervención se cierra con la aprehensión de dos remolques, una treintena de garrafas de gasolina, un tractor, equipos electrónicos, dinero en efectivo y numerosa documentación.
Los investigadores sospechan que, ante tanta infraestructura, el grupo se dedicaría también al rescate de estupefacientes introducidos por vía marítima, tanto en nuestras costas como las andaluzas.
