Cambio de ciclo en el Fabril
El filial afronta una temporada con muchas caras nuevas pero manteniendo la apuesta por crear talento
A Coruña
Con "moita ilusión e ganas de traballar". Así confiesa Óscar Gilsanz que ha llegado el filial al comienzo de la pretemporada. El Fabril se pone en marcha en una campaña donde habrá caras nuevas debido al cambio de ciclo que afrontan. Por eso, a estas alturas es difícil poner un listón a la temporada que viene por delante. "A 17 de julio la meta es gestionar (los cambios), estamos en un cambio de ciclo, entran o salen jugadores por edad, este año quizás más acusado, suben juveniles, llegan fichajes... hay que adaptar a los jugadores a una manera de jugar. Estamos en eso. El objetivo es competir, subir un escalón más y que muestren su mejor nivel" explica el técnico.
La pretemporada transcurre por los caminos habituales en estas fechas, con el ascensor en pleno funcionamiento. Futbolistas del filial trabajan con el primer equipo y juveniles completan el trabajo del Fabril. El equipo ha incorporado, por ahora, a cuatro futbolistas: Aarón Sánchez, Iker Vidal, Dylan Iglesias y Jaime Garrido, "jugadores que veníamos siguiendo. Vienen en línea ascendente de crecimiento individual y como futbolistas. Creemos que es el momento adecuado para seguir creciendo" explica Gilsanz. La puesta a punto del equipo incluye por ahora cuatro partidos. El miercoles 24 jugarán ante el Silva en Abegondo, el sábado 27 frente al Atlético Arteixo en Ponte dos Brozos, el miércoles 31 jugarán ante el Lugo en Vilalba y el sábado 3 de agosto recibirán al Bergantiños.
El verano comenzó con los rumores, confirmados por el propio club, del debate abierto sobre el reparto de banquillos entre Manuel Pablo y Óscar Gilsanz. Una situación que el técnico del filial quiso vivir con normalidad. "Son cosas que se hablan, será un análisis en alto para todos. Todo sigue como está, el trabajo de la cantera es muy bueno de arriba abajo y la continuidad es buena para todos". Finalmente le tocará gestionar la evolución de los jóvenes valores del filial, una progresión que debe llevarse "con cautela. Hay que creer en el jugador joven y creer en él. No todos tienen el mismo ritmo para llegar al fútbol profesional".
Uno de los que más está llamando la atención es el juvenil de primer año Pablo García, que trabaja con la primera plantilla en este verano. "Es un jugador de primer año juvenil, es muy joven. da pasos, posiblemente compita con el Fabril y juvenil, tiene buenas condiciones, apunta a ser jugador importante en este club pero hay que ir con calma y que los pasos que se den con cautela". Calma y cautela, dos palabras que, tras lo visto hoy, habrá que tener muy en cuenta en el trabajo del Fabril de esta campaña.