¿Frenar la moda o un sector textil sostenible y circular? A Coruña convierte un problema en una oportunidad

A Coruña

La industria de la moda es responsable del 10 % de las emisiones mundiales de carbono, más que los vuelos internacionales y el transporte marítimo combinados.

Ante este problema se están aportando soluciones: Una normativa europea que exige circularidad, empresas más concienciadas y un cambio del modelo de consumo por parte de las personas.

Coruña es ejemplo, hace del problema una oportunidad. Más de 70 personas trabajan en COLEO en POCOMACO, una entidad de la economía social que recupera y da nueva vida a las prendas. WIM Studio, aprovecha los textiles desahuciados como materia prima para crear piezas únicas y personalizadas.

El problema

Si, la moda va muy rápido, la moda actual es la de la ropa de usar y tirar. Que esto sea así la convierte en la segunda industria más contaminante del mundo. Para que nos hagamos una idea, la industria de la moda produce más emisiones de carbono que todos los vuelos y envíos marítimos internacionales juntos.

De acuerdo con la Conferencia de la ONU sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), la industria de la moda es responsable de una amplia gama de efectos negativos en el ámbito social, económico y ambiental. La “moda rápida” ha llevado a un consumo desenfrenado de ropa barata, con colecciones que cambian constantemente y fomentan la compra y el desecho frecuente de prendas. Desde el año 2000 hasta 2014, la producción de ropa se ha duplicado, y la tendencia sigue en aumento.

Cada día se consume más ropa y de más bajo coste, la “moda rápida”, que ofrece a los consumidores cambios constantes de colecciones a bajos precios y alienta a comprar y tirar ropa frecuentemente. Esto ha provocado que se duplicara la producción de prendas en el periodo de 2000 a 2014 y hoy continúa aumentando.

Por si este problema fuera poco, apenas se reciclan o se reutilizan las prendas así que se entierra o quema una cantidad de textiles equivalente a un camión de basura cada segundo.

Otro de los grandes problemas de la industria de la moda actual es la gran cantidad de agua que se consume para fabricar sus productos. Pocas personas saben que se necesitan hasta 7.500 litros de agua para hacer unos vaqueros. La Organización Mundial de la Salud (OMS), dice que son necesarios entre 50 y 100 litros de agua por persona y día para cubrir las necesidades básicas de una persona; así que nuestros vaqueros podrían hacer vivir a una persona entre 75 y 150 días.

De hecho, todo el sector consume 93.000 millones de metros cúbicos de agua cada año, una cantidad suficiente para que sobrevivan 5 millones de personas. Se trata de una industria que derrocha miles y miles de litros de agua en procesos altamente ineficientes que es responsable del 20% del desperdicio total de agua a nivel global.

La solución

• La normativa: Contexto Europeo

La Estrategia de la UE para los Textiles Sostenibles y Circulares establece acciones concretas para alargar la vida útil de los productos textiles, facilitar su reparación y reciclaje, y fomentar el uso de materiales reciclados. Se introducirá un Pasaporte Digital de Producto para mejorar la transparencia y la información sobre la sostenibilidad de los textiles, y se implementarán medidas para reducir la liberación de microplásticos durante el lavado de prendas sintéticas (Environment) (Environment).

−5 millones de toneladas de ropa desechada cada año en la UE: alrededor de 12 kg por persona.

−20 a 35 puestos de trabajo creado por cada 1000 toneladas de textiles recogidos para su reutilización.

• Nosotros: Tendencias en el consumo de segunda mano.

Según un estudio de la Asociación para la Gestión del Residuo Textil (Decathlon, El Corte Inglés, H&M, IKEA, Inditex, KIABI, Mango, Sprinter y Tendam), el 35% de las personas menores de 24 años ya compra textil y calzado de segunda mano. Este cambio de hábitos supone un reto para las grandes firmas, que han lanzado plataformas para vender ropa usada. A pesar de que los jóvenes muestran una mayor inclinación hacia la circularidad, son quienes menos tiempo usan las prendas, destacando un comportamiento impulsado en parte por su poder adquisitivo y el uso de aplicaciones digitales para la compra-venta. Datos que contrastan con los mayores de 45 años ya que de éstos, solo el 25,9% compra textil y calzado de segunda mano.

Esta asociación es una Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP) fundada hace menos de 2 años y que responde a la nuevas normativas de residuos.

• Las empresas

Muchas compañías se están adaptando a la nueva persona consumidora, la persona consumidora sostenible. Por ejemplo, Inditex, que ha lanzado una plataforma para la venta, reparación y donación de prensas usadas ZARA PRE-OWNED. Con precios de reparación muy accesibles, por ejemplo cambiar una cremallera cuesta Cambiar cremallera 5.5€, puedes consultar todo los precios en su web.

Ejemplos con marca Coruña

• WIM Studio

En este contexto, surgen iniciativas innovadoras que buscan revertir estos efectos negativos y promover la sostenibilidad en el sector textil. Un ejemplo destacado es WIM Studio, cuyo enfoque innovador está marcando la diferencia.

Nos lo cuenta su CEO y cofundador Pablo Garcia-Bodaño Lopez:

WIM Studio está en el Polígono de Alvedro en Culleredo y utiliza lo que antes eran residuos textiles de una empresa para crear nuevos materiales para su proceso de negocio. Resulta alucinante ver como de los restos de sábanas blancas y de batas azules de hospital se fabrican paneles que tienen el aspecto y el tacto de porcelánicos y, que se usan para la construcción o reforma de los hospitales de esa empresa.

La cadena ILUNIOM Hotels, hoteles que son economía social utiliza ya estos materiales de marca coruñesa para las zonas de entrada, murales y muebles del recibidor. La materia prima es el propio textil deshechado por el hotel con un aglomerante alternativo a las resinas, que provienen del petróleo, la cascara de mejillón, abriendo así oportunidades económicas adicionales al sector pesquero y marisquero.

• COLEO

Ubicada en el polígono de Pocomaco, en A Coruña, Coleo Recycling está revolucionando la industria del reciclaje textil. La empresa prevé crear 70 nuevos puestos de trabajo en su próxima instalación en el parque empresarial de A Laracha, donde gestionarán inicialmente 5.000 toneladas de residuos textiles, con planes de alcanzar las 10.000 toneladas a medio plazo.

En palabras de Nacho Bueno, director de marketing de Coleo:

Esta innovadora propuesta no solo contribuye a la reducción de residuos textiles, sino que también fomenta la economía local y minimiza la huella de carbono, mostrando que es posible convertir un problema en una oportunidad para un futuro más sostenible.

Retos

−Se analizaron recientemente en una jornada organizada por VIRATEC, el Cluster Gallego de Soluciones Ambientales y Economía Circular, sobre los retos de la cadena de valor del sector textil.

−La obligación de la recogida separada del textil en la vía pública por parte de los ayuntamientos el 1 de enero de 2025, tenemos en la actualidad 1 contenedor para cada 2.200 personas, en comparación, en Francia hay 1 contenedor para 1.440 personas.

−El ecodiseño: diseñar prendas para que puedan ser fácilmente recicladas. Actualmente existe un reto con materiales como el elastano, muy difícil de separar en los procesos actuales.

−La sensibilización de las personas consumidoras: Nosotras podemos cambiar el mercado, tenemos más fuerza que cualquier normativa.