Williot presenta su candidatura a la titularidad en la banda izquierda
El joven sueco marcó un golazo y dio la asistencia a Aspas en solamente 45 minutos contra el Alavés
VIgo
En pretemporada, pese a las reiteradas oportunidades que Bamba tuvo para demostrar que es Bamba, Williot siempre dejó detalles muy interesantes. No era más que la confirmación de la progresión que está teniendo el sueco. Cada vez juega con más confianza, cada vez quiere más el balón, tira desmarques para hacer daño, se asocia mejor y asume con naturalidad la responsabilidad. No tiene nada que ver el Williot de ahora con ese jugador frágil físicamente al que le costaba adaptarse al ritmo y al fútbol de choque. Ahora ha ganado potencia y fuerza y se le nota. El viernes debutó jugando la segunda parte y siendo actor principal en la remontada celeste. Lo hizo con un golazo con el exterior y con una asistencia, a lo Laudrup, para dejar a Aspas en ventaja dentro del área. Un gol y 1 asistencia en 45 minutos. El mismo balance que consiguió Carles Pérez pero en toda la temporada anterior.
El costamarfileño volvió a ser titular para ver si se le veían los galones y no las costuras pero no pudo ser. Una nueva oportunidad perdida por el fichaje estrella de la pasada temporada y una de las fichas más elevadas. Y eso que tuvo que improvisar Luis García Plaza poniendo a Carlos Vicente, un extremo, de lateral derecho. Pero casi no sufrió salvo en el 41 en el gol anulado a Aspas en el que Bamba, si filtra un pase muy bueno a Douvikas.
Pero Williot ya presentó sus credenciales para ser titular contra el Valencia y a desbancar a un Jo Bamba que el pasado año acabó con 3 goles y 2 asistencias. Y eso que el tercero de sus goles lo marcó en la penúltima jornada en Granada. Un balance muy pobre para el extremo celeste que, además, ve la seria amenaza inminente del sueco para la titularidad. Más allá de su efectividad, se lo está ganando por fútbol; por presencia y crecimiento en su rol de jugador importante. Y esa es una gran noticia para el Celta. Puede estar tranquilo Claudio Giráldez en la banda izquierda. No así en la derecha.
Lo bueno de Swedberg es que no es casual que lleve una media de un gol cada 87 minutos. Marcó 5 goles en solamente 434 minutos de Liga jugados en la 23-24. Goles que sirvieron para sumar porque marcaba el 2-3 en Almería en el 87 con un testarazo impresionante. Su desmarque y cabalgada le permitió irse desde el centro del campo y recortar con una pasmosa sangre fría a Rui Silva para poner el 2-1 contra el Betis en el 94. Después llegó uno de los goles de la salvación: el desmarque al segundo palo, control orientado y remate abajo para poner, en aquel momento, el 0-2 en el Nuevo Mirandilla. Al final sirvió para un valioso empate ante el rival por la permanencia. Contra Las Palmas logró batir en el mano a mano a Valles poniendo el gol de la remontada (2-1) antes de acabar 4-1 goleando a los de García Pimienta. Y al Athletic le marcó un golazo al poco de salir para empatar un partido en Balaídos que se había complicado en la primera mitad.
El club celeste pagó 5,5 millones de euros al Hammarby sueco que se guardó un 10% de una futura venta. El introvertido pero descarado extremo ha presentado sus credenciales para la titularidad en la Liga y para dejarle claro a Bamba que va a tener que apretar mucho para estar por delante en la rotación.