Llega a las aulas una nueva generación de docentes: "Enseñar con amor es lo más importante"
La educación gallega recibe este curso a 1.256 profesionales que darán clase a más de 300.000 alumnos en Infantil, Primaria y Secundaria
Enseñar "con amor y vocación": así son los nuevos docentes gallegos
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Santiago de Compostela
Días, semanas, meses e incluso años consumidos entre libros, apuntes y subrayadores. Quien oposita dedica miles de horas a un mismo objetivo: conseguir una plaza en el cuerpo de funcionarios públicos. Se trata de un proceso complicado, en el que las renuncias en el ámbito personal no son pocas, pero quienes logran el puesto, tienen claro que vale la pena.
Es el caso de los 1.256 profesores que han conseguido un destino para este curso en las aulas gallegas. Algunos, como es el caso de Ana, profesora de Tecnología, ya llevan tiempo trabajando en la enseñanza pública, una ocupación que han estado compaginando con las jornadas de estudio: "Levaba tres anos preparando a oposición e este ano aprobei", explica.
Pero también hay quien va a probarse dando clase por primera vez más allá de las prácticas de la facultad. Javier, maestro de Educación Primaria, tiene 22 años y es el más joven de esta promoción de incorporaciones: "Supoño que o día antes durmirei pouco, pero agora é máis ilusión e ganas de ter todo preparado e organizado ca nervios", confiesa.
Todos coinciden en que la enseñanza es una disciplina muy vocacional. Denise, docente de Educación Infantil, cree que este es un aspecto clave: "Ter ganas, ter ilusión, ensinar con cariño, con amor... Iso é o máis importante", asegura.
Aunque hay casos en los que la vocación llega de manera tardía, y no por ello carece de intensidad. Ejemplo de ello es Borja, que dejó la carrera de Química para estudiar Primaria y ahora es maestro de Educación Especial. Él es uno de los que no puede esperar a comenzar a trabajar con sus alumnos este curso. "O máis importante é ter empatía e saber poñerse no seu contexto e nas súas capacidades para poder traballar dende os seus intereses", considera.
Ana, Javier, Denise y Borja, como el resto de esta nueva generación de docentes, tienen por delante un año de prácticas. Más allá, se quedarán a la espera de la asignación de un destino definitivo. En todo caso, por lo pronto, para ellos (y para sus alumnos) todo comienza el próximo día 11.
