Los servicios de dependencia, saturados en Galicia: "Hay procesos que se dilatan más de un año"

Santiago de Compostela

Están desbordados y sin dar abasto. Los servicios de valoración de la dependencia acumulan cada vez más retrasos tras los cambios introducidos por la Xunta en un intento de simplificar la burocracia. El efecto, de momento, ha sido el contrario, tal y como denuncian desde el Colexio de Traballo Social de Galicia. Todo el proceso para obtener la condición de dependiente supera el año, con dilaciones en el primer trámite. "Lo que podía demorar unos dos meses está llevando ahora más de seis", sotiene Miriam Rodríguez, presidenta del Colegio "porque para dar la valoración del grado de dependencia es necesario que esté aprobado el Plan Individualizado de Atención".

"Se saturan otros servicios"

Es la denuncia que deja aquí en la SER la presidenta del Colegio de Trabajo Social que pide a la Xunta un refuerzo de personal que de verdad reduzca los trámites y los tiempos en la valoración de la dependencia. Y es que sostiene que están saturados, no solo los trabajadores sociales sino en otros niveles como la atención primaria a donde acuden a preguntar por el estado de sus expedientes las personas pendientes de valoración. Dice que el tiempo medio de espera supera el año en todas las provincias.

A esto se suma, insiste, la falta de información que reciben las familias. Dice Rodríguez que la han de proporcionar los propios trabajadores sociales.

Desbordado a todos los niveles

Así ven el sistema de dependencia los que día a día trabajan en él. En la SER hemos hablado con algunas trabajadoras sociales para conocer a qué se enfrentan cada jornada. Es el caso de Mónica Palacios, que lleva treinta años en el concello de Tordoia. Sostiene que tiene más de 1.500 expedientes abiertos, que hay jornadas con más de 40 citas diarias y que en atención sociocomunitaria están completamente saturados. Nos explica, en conversación con la SER, que hay compañeras que están enfermando y solicitando altas voluntarias para poder cumplir plazos y que "somos nós as que damos a cara pola administración sen que esta poña remedio".

Pide que se cambie el decreto de 2012 para actualizar las ratios al envejecimiento poblacional y critica el Bono Coidado de la Xunta. Dice que se han triplicado las solicitudes de libranzas sin que eso vaya acompañado de un incremento del personal en la misma medida.

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Lo mismo sucede con las trabajadoras de Atención Primaria del SERGAS, como Isabel Fernández, que denuncia que los retrasos no paran de aumentar. Explica que tiene usuarios que han sido valorados el pasado mes de diciembre y siguen a la espera de que se les asigne un recurso, bien sea servicio a domicilio, algún importe económico o una plaza en un centro de día. Casi dos años después de que iniciaran el procedimiento.

Isabel Fernández critica además el funcionamiento del sistema, porque la saturación en atención comunitaria acaba colapsando también un servicio que, en principio, debería dedicarse a otro tipo de atención.