Sociedad

Las monjas Clarisas reclaman uno de los retablos de la antigua iglesia de Santa Clara en Pontevedra

El documento de venta del convento permite a las monjas recuperar todos los retablos del templo, el coro y el órgano. El vicepresidente de la Diputación acusó al alcalde de Pontevedra de consentir el mayor expolio de obras de arte cometido en la capital

Las monjas Clarisas reclaman uno de los retablos del antiguo convento de Santa Clara en Pontevedra que será trasladado a Santiago. La opción de recuperar todos los retablos de la antigua Iglesia está incluida en el contrato de venta firmado en diciembre del 2021 entre las clarisas y el alcalde de Pontevedra; pero que llevó al vicepresidente de la Diputación a acusar al alcalde de Pontevedra de permitir el mayor expolio de arte cometido en la capital.

Hora 14 Pontevedra (07/10/2024)

Según el contrato de venta, las monjas tienen la opción de reclamar todos los retablos de la Iglesia antes de terminar el año 2025, que fueron además valorados por si el concello, o ahora la Diputación como propietaria del convento, quisieran comprarlos. El altar mayor de la Iglesia se valoró en 126.250 euros, los retablos laterales en 99.000 euros, el púlpito en 22.000 euros, el coro en 14.000€, el órgano en 135.000€ y el retablo de la Virgen de los Desamparados, que ahora reclaman las monjas, en 74.000 euros.

Esta mañana en rueda de prensa, el vicepresidente de la Diputación explicó que el organismo provincial no puede evitar el traslado de este retablo porque la opción figura entre las cláusulas del contrato de venta. Rafa Domínguez denunció también que en la negociación de la compra de Santa Clara el alcalde permitió también que las monjas se llevasen hasta 18 imágenes religiosas fechadas entre los siglos 14 y 19.

El listado que aportó la Diputación está formado entre otras imágenes por un San Miguel en madera policromada y dorada del año 1734; una imagen de la Asunción de María, en madera policromada de la misma fecha; un Cristo crucificado de madera policromada del siglo XVIII; una imagen de San Fernando policromada del año 1734; otras de San Francisco de Asís, de San Antonio de Padua, de Santa Clara, de San Vicente Mártir, una imagen de relicario situada en una urna acristalada, imágenes de ángeles del siglo XVIII; otra de Asunción que presidía el retablo mayor; una imagen de Santa Úrsula, otra de Santa Bárbara, del año 1538; otra de Santiago Apóstol del segundo tercio del siglo XVIII; una imagen de la Inmaculada Concepción del siglo XVIII y un Niño Jesús de Praga del siglo XIX, así como imágenes de San Rafael y Tobías, del siglo XVII; de la Virgen del Carmen, del siglo XIX; de San Juan Bautista y San Benito, ambas del siglo XVIII; y de Jesús Nazareno.

También imágenes de la iglesia como San José, una escultura pétrea del siglo XIV y la figura de Santa Clara que se situaba en la parte superior de la fuente situada en el patio del convento.

El vicepresidente de la Diputación indicó que “todas estas obras se perdieron para los pontevedreses; todas fueron separadas del entorno para el que estaban destinadas; e acusó a Fernández Lores de ser “responsable de la pérdida de este patrimonio histórico y cultural, de valor incalculable para Pontevedra”.

Rafa Domínguez acusó al alcalde de Pontevedra de consentir el mayor expolio de obras de arte cometido en la capital, por sectarismo e ideología. El vicepresidente de la Diputación indicó que él mismo está negociando actualmente con las Clarisas la posible recuperación de ese patrimonio religioso, previo pago a las monjas; aunque no tiene garantías de que pueda regresar a Pontevedra.

Desde el concello de Pontevedra, el concejal César Mosquera explicó que, en su día, las monjas “no quisieron vender las imágenes religiosas ni otros elementos que formaban parte del culto”; y que en la Iglesia quedaron los retablos, el coro y el órgano porque las Clarisas no tenían ubicación para todo ello.

En todo caso, el concejal nacionalista precisó que en el contrato de compra de Santa Clara se valoraron todos esos elementos reservándose el propietario del convento, actualmente la Diputación, una opción de compra de todo ello, que, según Mosquera, se podría haber ejercido en los últimos meses. Por ello, Mosquera acusó a Rafa Domínguez de “patinar” de nuevo en una de sus críticas al gobierno local.