Los taxistas de A Coruña reconocen problemas para pedir un taxi en hora punta y piden que se usen las aplicaciones
Consideran que el número de líneas de la centralita se ajusta a la necesidad del servicio en la ciudad
Antonio Vázquez, presidente de RadioTaxi
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A Coruña
Cada vez son más las críticas al servicio de taxis de la ciudad por las deficiencias a la hora de solicitar uno de ellos a través de la centralita. El presidente del colectivo, Ricardo Villamisar, no niega los problemas, pero los sitúa en las horas puntas. Considera suficientes las quince líneas telefónicas y pide a los usuarios que hagan uso de las diferentes aplicaciones para no sobrecargarlas.
Reconocen que en los últimos tiempos han notado un repunte en el uso del transporte público por los cambios en los hábitos de la ciudadanía. El aumento de calles peatonales en el centro ha provocado que más gente utilice el taxi y el autobús en detrimento del coche particular. Una mayor demanda que tiene como consecuencia "una circulación más complicada".
500 licencias en A Coruña
En La Ventana de las Rías con Mayte González enfocamos la mirada hacia el sector del taxi, un servicio fundamental que enfrenta diversos desafíos en A Coruña y sus alrededores. Con más de 500 licencias en la ciudad, A Coruña cuenta con un número de taxis que supera el promedio estatal por habitante. Sin embargo, los usuarios reportan dificultades para encontrar taxis en áreas específicas, en horas punta o al cierre de eventos importantes. Este problema también se percibe en la zona de Ferrolterra, donde la disponibilidad de taxis ha sido un tema recurrente.
Para entender mejor esta situación, hablamos con Antonio Vázquez, presidente de RadioTaxi, una de las principales asociaciones de taxistas en la ciudad. "¿Faltan realmente taxis en A Coruña?", le preguntamos. Vázquez explicó que la cantidad de taxis en sí no ha disminuido; sin embargo, existen factores que afectan la eficiencia del servicio. "La circulación en la ciudad se ha ralentizado mucho, lo que significa que un servicio que antes llevaba menos tiempo, ahora puede tomar hasta veinticinco minutos". Esto reduce la cantidad de servicios que un taxi puede ofrecer en un mismo lapso, limitando su disponibilidad.
Otro obstáculo es la creciente dificultad para encontrar conductores adicionales que trabajen en los taxis. "Muchos coches solían estar a cargo de dos personas, pero el aumento de los costos del seguro, que ahora rondan los ocho o nueve mil euros anuales, hace que sea menos viable añadir conductores", añadió Vázquez.
En cuanto a las mejoras posibles, Vázquez sugirió que la ampliación de vías principales como Alfonso Molina podría incluir carriles exclusivos para autobuses y taxis. Esto reduciría el tiempo de los trayectos en momentos críticos, beneficiando tanto a los taxistas como a los usuarios y desincentivando el uso de vehículos privados en estas rutas congestionadas.
Competencia de servicios alternativos como Cabify
A pesar de que servicios como Cabify han ingresado al mercado coruñés, su impacto ha sido moderado debido al número limitado de vehículos disponibles. "Si ya es complicado encontrar un taxi en ciertos momentos, conseguir un vehículo de estas plataformas también puede ser difícil, lo que reduce la competencia directa para nosotros", explica Vázquez.
Problemas en Ferrolterra y el Convenio del Aeropuerto de Alvedro
La situación del taxi en Ferrolterra y otras áreas de Galicia, como Costa da Morte y Santiago, también refleja problemas similares. "Las zonas urbanas se han convertido en zonas 30, donde la velocidad es menor. Esto, sumado a la necesidad de servicios seguros para quienes no pueden conducir después de beber, aumenta la demanda en picos específicos, generando una mayor presión en la disponibilidad de taxis", detalló Vázquez.
Por otro lado, el problema de los taxis en el aeropuerto de Alvedro, donde los taxistas de Culleredo son los únicos permitidos para recoger pasajeros, continúa sin resolver. "Llevamos años tratando de encontrar una solución que permita a los taxis de A Coruña operar en el aeropuerto, pero es un acuerdo que depende de los ayuntamientos de Culleredo y A Coruña", señala Vázquez, subrayando la necesidad de una regulación que facilite un servicio eficiente a los usuarios de Alvedro.
Modernización y uso de aplicaciones
Aunque se ha especulado que ahora es obligatorio pedir taxis a través de aplicaciones, Vázquez aclara que la llamada telefónica sigue siendo el método más común. "Las aplicaciones son una opción más para mejorar la experiencia del usuario, especialmente cuando las líneas telefónicas están ocupadas", comenta. "Este avance permite que los taxis disponibles en ciertas zonas respondan con mayor agilidad, sin necesidad de intervención manual".
La situación del taxi en A Coruña pone de manifiesto la importancia de adaptarse a los cambios en la movilidad urbana. Mejoras en la infraestructura, una regulación más inclusiva y la implementación de tecnologías digitales pueden ser claves para garantizar un servicio accesible y eficiente para los habitantes y visitantes de la ciudad.