La Fundación Érguete-Integración cumple su 25 aniversario: "Cualquiera de nosotros puede ser una persona vulnerable"
La entidad que comenzó trabajando por la inserción socio- laboral de personas drogodependientes, impulsa hoy en día programas de formación para todo tipo de usuarios
Vigo
En este mes de noviembre, la Fundación Érguete- Integración cumple sus bodas de plata. 25 años en los que han estado al lado de las personas más vulnerables, atendiéndolas, formándolas y asesorándolas en su camino. Creada en 1999 en Vigo, nacía de la mano de la Asociación Érguete, una entidad que fue concebida por un grupo de madres que llevaban años luchando contra el narcotráfico y la drogodepencia que padecían sus hijos. Eran los años duros de la droga en Galicia. Unidas, estas madres comienzan a trabajar para darles asistencia jurídico social a este colectivo. Pronto se dieron cuenta que, con las personas que lograban rehabilitarse había que ir un paso más allá y acompañarlas de nuevo en su incorporación socio laboral. Empezaba así, hace 25 años, el camino de la Fundación. "En un primer momento empezamos a hacer talleres ocupacionales y talleres de empleo y, posteriormente, nos especializamos en el ámbito de la orientación laboral y la inclusión social, basándonos en itinerarios especializados de inserción", explica Ana Álvarez, directora de la Fundación Érguete- Integración.
Con el paso de los años, la Fundación amplía sus ámbitos de actuación, especializándose la entidad a través de sus áreas en casos como el de mujeres víctimas de violencia de género, ex drogodependientes o emergencia extrema, personas sin hogar que se benefician de su programa de atención de urgencia Calor- Café y que puede asistir a lo largo de una jornada en diferentes puntos de la ciudad hasta a un centenar de personas. "Nuestro programa el año pasado atendió a más de 900 personas. Son itinerantes, vienen y dejan de venir pero, más o menos llegamos a atender a más de 100 al día", cuenta Nuria Cuña, psicóloga del Programa Intervención en Medio Abierto.
Unos casos de exclusión severa los de las personas sin hogar que, por desgracia, explican desde la entidad no dejan de incrementarse en estos últimos años y que están mostrando su cara más dura, con casos de drogodependencia, de alcoholismo y, sobre todo y de manera generalizada, de problemas de salud mental. "El hecho de no tener un hogar ya te pone en el disparadero de tener algún problema de salud mental. También el estar en la calle durante horas conlleva muchas veces que acaben consumiendo drogas o alcohol", apunta la psicóloga.
Formación para todos
El objetivo de la Fundación Érguete- Integración es dar apoyo a todas aquellas personas vulnerables que, apunta Soledad Costas, responsable del programa Incorpora de la entidad, en la sociedad actual puede ser cualquiera. "Posiblemente muchas personas si se quedasen sin trabajo serían vulnerables por superar una determinada edad, porque no tiene la formación básica que actualmente se exige, porque es migrante y sus estudios no están homologados, se pueden dar muchas circunstancias", señala.
La Fundación trabaja, fundamentalmente, en cuatro áreas de intervención: formación e incorporación laboral, , intervención social y área de igualdad e intervención en medio penitenciario. Precisamente, esta última área nación en 2007 para facilitar la incorporación laboral de las personas privadas de libertad. La Fundación Érguete- Integración la lleva a cabo en los centros penitenciarios y de inserción de toda Galicia con un completo programa de formación y empleo. En lo que llevamos de año, más de 400 personas han sido atendidas y 50 se han incorporado a un trabajo. " Es multicausal la situación de las personas privadas de libertad entonces necesitan mucho de todo, desde acciones formativas hasta talleres de habilidades sociales. Su camino es muy largo para llegar a tener un buen perfil que les facilite la vuelta al entorno social, comenta María Rodríguez, responsable de Intervención Penitenciaria.
Para todos sus programas de inserción laboral, desde la Fundación Érguete Integración piden más tiempo de formación, de adaptación de los usuarios que completan los programas ya que "no se consigue la inserción integral de una persona en situación de calle, por ejemplo, en 6 o en 9 meses, a veces, ni siquiera, en dos años", apunta la directora de la entidad.