Eróticas alternativas: Fetichismos, BDSM y otros secretos que nunca te contaron

A Coruña

En la sección ¡Cómo lo haces! de Hoy por Hoy A Coruña, el equipo abordó un tema tan fascinante como desconocido para muchos: las eróticas alternativas. De la mano de la sexóloga Sonia Martínez, se exploraron prácticas, conceptos y la importancia de normalizar las diversas formas de disfrutar de la sexualidad.

¿Qué son las eróticas alternativas?

Sonia comenzó aclarando el concepto: "Todo aquello que se sale de las prácticas eróticas convencionales". Estas últimas suelen estar limitadas a relaciones coitales o el sexo oral, pero el espectro es mucho más amplio. Las eróticas alternativas incluyen cualquier práctica que genere placer y que esté consensuada entre las partes, desafiando la mirada tradicional que muchas veces las etiqueta como "anormales" o "perversas".

"Hemos patologizado mucho las prácticas no convencionales," subrayó Sonia. "Pero nada tiene que ver con que sean un problema en sí mismas. El verdadero problema está en la mirada que las juzga."

Parafilias: un término médico con un trasfondo cultural

Sonia explicó que el término "parafilias" proviene de las palabras griegas para (al margen) y filia (amor o atracción). Aunque esta terminología ha sido asociada históricamente con patologías, muchas de estas prácticas son simplemente expresiones eróticas alternativas que no generan malestar en quienes las disfrutan. Por ello, la experta prefiere el término eróticas alternativas, mucho más positivo y libre de juicios.

Entre las prácticas mencionadas destacaron los fetichismos, definidos como la atracción hacia una parte del cuerpo o un objeto específico. Sonia desmontó mitos: "Un pie, un zapato, unas orejas o incluso un globo pueden ser tan eróticos como unos genitales. Todo depende de la mirada y del significado que le demos."

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BDSM: explorando el juego de poder en las relaciones

El programa también se adentró en el mundo del BDSM, un término que engloba una variedad de prácticas que giran en torno a la cesión consensuada de poder. Sonia explicó las siglas:

• B: Bondage (juegos de ataduras).
• D: Dominación y disciplina.
• S: Sadismo (disfrutar infringiendo dolor) y sumisión (obedecer).
• M: Masoquismo (disfrutar recibiendo dolor).

Desde juegos de roles como policía y detenido hasta el clásico "spanking" (azotes), Sonia enfatizó que todas estas prácticas deben ser realizadas en un entorno seguro, consensuado y respetuoso. Incluso comentó sobre la importancia de las palabras clave, utilizadas para detener el juego en caso de incomodidad o malestar.

"Lo fundamental del BDSM, como de cualquier práctica sexual, es el consentimiento. Todo debe ser libre, voluntario y enfocado en el disfrute mutuo."

La importancia de la aceptación personal

Uno de los puntos más destacados de la conversación fue la relación entre las eróticas alternativas y la autoaceptación. Según Sonia, el juicio social y personal muchas veces impide disfrutar plenamente de estas prácticas. "Es crucial conocerse, aceptarse y disfrutarse. No podemos disfrutar si no nos aceptamos a nosotros mismos."

Además, subrayó la necesidad de una educación sexual más amplia que fomente la normalización de estas prácticas y ayude a las personas a superar el estigma asociado.

Próximamente: el sadismo bajo el microscopio

El programa cerró con un adelanto para la próxima edición, donde Sonia prometió profundizar en uno de los aspectos más controvertidos: el sadismo. "Aunque disfrutemos infringiendo dolor, hay mucho más detrás que debemos entender."

Sin duda, ¡Cómo lo haces! sigue demostrando que la educación sexual puede ser tan enriquecedora como entretenida, abriendo la puerta a un universo de posibilidades para disfrutar de la sexualidad de manera sana y libre de prejuicios. ¡No te pierdas el próximo capítulo!