"Decidí coger el alta después del tratamiento contra el cáncer, volví y al día siguiente mi empresa me despidió"
Pacientes oncológicos relatan situaciones de discriminación en su inserción laboral | La actriz Cristina Medina trabaja en la creación de la plataforma "Oncolomeeting" para enfermos de cáncer y familias
A Coruña Opina (15/12/2024)
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A Coruña
"Como físicamente estaba bien, decidí coger el alta, me dijeron que me cogiese las vacaciones del año anterior y cuando volví me llamaron al despacho y me despidieron". Este es el testimonio de Angelina Pérez, una vecina de A Coruña a la que le diagnosticaron cáncer de mama y que tras finalizar el tratamiento se reincorporó a la empresa se topó con el despido.
En Galicia, 1.235 personas enfermas de cáncer estaban el año pasado en situación laboral de riesgo. De ellas 363 están sin empleo, según datos de la Asociación de Lucha contra el Cáncer.
La inserción laboral en pacientes oncológicos es una de las asignaturas pendientes que requiere acciones políticas y protocolos en las empresas para evitar situaciones de discriminación por el hecho de tener cáncer. Así lo han denunciado en A Coruña opina, de Radio Coruña Cadena SER, enfermas, profesionales del ámbito sanitario y la Fundación Naru.
Marta de la Fuente, psicóloga y especialista en ansiedad y estrés, ha demandado protocolos claros en los departamentos de recursos humanos de las empresas. Considera que en las de gran tamaño no suelen producirse, por lo general, estos problemas y sí en las pequeñas porque "no saben cómo gestionar emocionalmente ni tienen la formación necesaria para acoger a un enfermo oncológico en su reincorporación laboral".
Julia Rodríguez, médica especialista en cirugía de cáncer de mama, es contundente: "No puede ser que las pacientes dependan de la suerte que tengan". Demanda una ley o norma que "defienda a estos enfermos" y haga posible su vuelta al ámbito laboral con todas las garantías.
Unas 110.000 personas con cáncer en España están en edad de trabajar. Por el hecho de tener esa enfermedad tienen un 34% más de posibilidades de quedarse sin empleo que las que no la tienen, según la Asociación Española de Lucha contra el Cáncer. Rozan los 9.000 pacientes oncológicos los que están sin trabajo. El 35% pertenecen a la franja de los 45 a los 64 años. El 21% de los enfermos de cáncer ha tenido que dejar de trabajar, un 14% se ha visto obligado a cambiar de trabajo, según la AECC.
La Fundación Naru trabaja en crear un espacio común donde exista información, apoyos y formación para abordar la inserción laboral de este tipo de pacientes. Su directora, Andrea Castromil, asegura que este es un problema que "no es contemplado suficientemente por la administración ni tampoco por la propia sociedad". "Hay muchas trabas" concluye. Son muchos los casos en los que la palabra cáncer se convierte en una losa que acaba en situaciones de discriminación que impiden recuperar el proyecto vital y profesional de quien ha tenido, tiene o ha superado esta enfermedad, según han puesto de manifiesto Carolina Pan y Montse Vázquez, ambas con "suerte" diferente en su vuelta al trabajo. La empresa de Carolina no contó con ella. Para Montse todo fueron facilidades.
La actriz Cristina Medina, a la que también le diagnosticaron un cáncer hace años, ha contado en el programa el proyecto en el que está trabajando. Se denomina "Oncolomeeting" y en pocos meses será una realidad. Será una Fundación con una plataforma para los que estén pasando un proceso canceroso y sus familias tengan un espacio común donde poder resolver dudas, obtener información y recibir apoyos y ayuda.
Olvido oncológico
El Gobierno aprobó el año pasado el decreto por el Derecho al olvido oncológico. Es el reconocimiento de un derecho para acabar con situaciones discriminatorias hacia quienes han sufrido o sufren un cáncer. Una persona que tenga cáncer o ya esté curada se encuentra en no pocas ocasiones con dificultades para contratar una póliza de un seguro o solicitar un préstamo en el banco, por poner un par de ejemplos. España ha tenido en cuenta la petición del Parlamento Europeo de dar soluciones a este problema y ha fijado una norma que, a falta de su desarrollo, evita que transcurridos 5 años desde el fin del tratamiento, siga apareciendo la denominación "paciente oncológico" en su historial médico. Es un paso importante para evitar que se de la discriminación.
