Esperando a Jo Bamba
El costamarfileño lleva cero goles y cero asistencias en lo que va de temporada
Vigo
Fue una de las operaciones más importantes de la etapa Luis Campos por su montante económico. Jonathan Bamba acababa contrato con el Lille y el director deportivo a tiempo parcial del Celta decidió apostar muy fuerte. Tan fuerte que el equipo vigués, para compensar la ficha que le podía ofrecer, casi igual que la de Aspas, le da un bonus de prima de traspaso que supera los cuatro millones de euros. Con el equipo haciendo la pretemporada en Portugal, llega Luis Campos mostrándose con el nuevo fichaje estrella del equipo. El jugador llamado a acabar con la maldición de la banda izquierda de ataque. El hombre que tenía que marcar diferencias y que venía avalado por unos números bastante interesantes en la Ligue 1.
Es cierto que tuvo un año de absoluta pájara en la temporada 21-22 con solo 1 gol y 1 asistencia, pero en la 22-23 volvía a dejar un registro de 6 goles y 7 asistencias en 34 partidos. En la 20-21 sus números fueron de 6 goles y 11 asistencias en la Ligue 1. En la 19-20 tuvo un rendimiento de 1 gol y 5 asistencias que subieron a 1 gol y 10 asistencias sumando Europa y la Copa. En la 18-19 sus registros fueron de 13 goles y 3 asistencias y, en la 17-18 se fue casi a dobles dígitos con 8 goles y 10 asistencias.
Por eso todavía es más extraño ver un rendimiento tan paupérrimo, tan poco resolutivo y con tan poca aportación en el fútbol ofensivo del equipo. Jonathan Bamba
La temporada pasada, como la mayor parte de los jugadores, puede siempre apelar a la excusa de la falta de adaptación al idioma, al club, a la ciudad e incluso también a la mala racha del equipo. El Celta necesitaba a un jugador que tirase del carro y que asumiera responsabilidades y no fue así. Acabó la temporada con 3 goles y 2 asistencias en 27 partidos de Liga y otros 2 goles más marcados contra el modestísimo Turégano. Eso sí, en diciembre llevaba 2 goles (Getafe y San Mamés) y 1 asistencia (Las Palmas). En esta temporada 24-25, Bamba lleva 0 goles y 0 asistencias. Diez partidos de Liga y 15 minutos en Copa del Rey para no ser decisivo ni siquiera incisivo ante ningún rival. No le sale casi nada, Claudio Giráldez está teniendo mucha paciencia con él y excesiva condescendencia para intentar recuperar a un jugador que tendría que ser franquicia.
El ejemplo más claro fue Cornellá. El Celta jugaba ante un rival tocadísimo, muy nervioso y que se la jugaba. Bamba jugó en la derecha y tuvo que cambiar de banda. En la izquierda tampoco aportó como extremo y acabó jugando de carrilero. Tres posiciones, tres oportunidades y cero rendimiento.
La segunda ficha más cara del equipo y una de las grandes apuestas de Luis Campos que está teniendo un rendimiento todavía peor al pobrísimo balance del año pasado. Y mientra seguimos esperando algún síntoma de que puede aportar algo, Williot ya lleva 2 goles y 3 asistencias, Hugo Álvarez 3 goles y 1 asistencia o Mingueza 2 goles y 5 asistencias. Pero lo más preocupante es que incluso Javi Rodríguez ya lleva 1 gol y 1 asistencia en Liga. Hasta Alfon ya se estrenó con gol y Pablo Durán con 1 asistencia. Le está adelantando casi toda la plantilla y eso tendría que ser algo que le llevase a la reflexión.
La Copa del Rey, que podría servir también de acicate para que su rendimiento mejorase, tampoco ha servido porque no se le ve demasiado enchufado. Solamente jugó 15 minutos testimoniales en Marbella contra el San Pedro de Alcántara. Y aquí también encontramos otra estadística que tendría que sonrojar a uno de los jugadores franquicia del Celta. Tadeo Allende que no cuenta para nada para Claudio, lleva 2 goles en Copa. Pablo Durán ha marcado otros dos, y hasta Fer López ya lleva un doblete. Alfon también está aprovechando el torneo del ko y lleva 3 asistencias. Hasta Ristic suma dos pases de gol y Luca de la Torre o Javi Rodríguez también han mejorado su estadística.
Estamos a punto de llegar a enero y seguimos esperando un partido en el que Bamba sea resolutivo. Una actuación que justifique el dinero pagado por el Celta y el esfuerzo realizado por el club. También que compense la fe que está teniendo Claudio para darle oportunidades estériles, que quedan en algún intento más o menos aseado de uno contra uno.
De un jugador de su nivel, de su talla y de su jerarquía se espera mucho más. El año pasado la justificación podría pasar por la mala dinámica del equipo. En esta temporada no hay excusa. En las últimas horas Bamba colgaba en su Instagram el perro creado por el artista Philip Banks llamado “Chill Guy”. Un perro que simboliza a un tipo tranquilo que no se preocupa por nada. Ojalá Bamba esté preocupado de ese rendimiento deficitario a precio de oro. 0 goles y 0 asistencias.