El Celta pone a prueba su solidez en Balaídos ante una Real que ganó en sus últimas cinco visitas a Vigo
Brais Méndez vuelve a casa
LISBON, PORTUGAL - OCTOBER 24: Brais Mendez of Real Sociedad celebrates after scoring his team's first goal during the UEFA Champions League match between SL Benfica and Real Sociedad at Estadio do Sport Lisboa e Benfica on October 24, 2023 in Lisbon, Portugal. (Photo by Joao Rico/DeFodi Images via Getty Images) / DeFodi Images
Vigo
El Celta cierra el 2024 en su zona de confort. El Celta juega este sábado en casa ante la Real Sociedad donde se siente seguro y donde los números respaldan su buen hacer. El equipo de Claudio Giráldez ha conseguido 17 de los 21 puntos que atesora en casa, arropado por su afición. Los vigueses no quieren que esa situación cambie. Por eso regresan hoy al trabajo concienciados de que cuando juegan en casa juegan en un entorno seguro.
El problema es que este sábado visita Vigo la Real Sociedad. Y el equipo vasco parece que le tiene tomada la medida a los vigueses. Las últimas cinco visitas ligueras a Balaídos, además de la copera del curso pasado(que dejó un amargo sabor de boca en el celtismo) las ha ganado el equipo de Imanol Alguacil. Los célticos no le ganan en Balaídos desde la temporada 2018/19 en la que se impuso en casa 3-1. De hecho los resultados del equipo donostiarra además de ser buenos son malos para los intereses vigueses. En esos cinco partidos sólo fueron capaces de marcar dos goles, por los 10 que tuvieron los vascos.
Un partido que supondrá, otra vez, el regreso a casa de Brais Méndez. En 2022, el Celta anunciaba el traspaso de Brais a la Real por unos 14 millones de euros y su sombra se hacía demasiado alargada. Con el futbolista de Mos en el campo, la Real Sociedad no ha perdido un solo partido. De hecho el año pasado, en la antesala del partido copero ganaban con un solitario gol de Brais.
Ahora estamos en una temporada diferente, con sensaciones diferentes, con un entrenador diferente y con una tendencia muy diferente en casa. Donde el Celta se siente fuerte y ha convertido a Balaídos, con la fuerza de los suyos, en un campo prácticamente inexpugnable. Y que siga así. El Celta sigue viviendo, por Balaídos, en una zona muy cómoda de la tabla clasificatoria.
