Dos jóvenes acusan al propietario de un bar de Vigo de abuso sexual
El acusado niega los hechos y asegura que es una denuncia que da "mala fama" a su local

Imagen de una caña sobre la barra de un bar. / Getty

Dos chicas han mantenido este jueves en el Juzgado de lo Penal 2 de Vigo que el propietario de un bar de Vigo besó a una de ellas y tocó en la zona íntima a la otra, cargos por los que el acusado, que lo niega, se enfrenta a un año y seis meses de prisión.
Una de las jóvenes, de 18 años, contó que el 3 de abril de 2024 fueron al bar porque conocían al acusado y buscaban al exnovio de una de ellas, con el que había tenido un problema.
Según su versión, el procesado les invitó a entrar, cerró con llave el local, tomaron unas consumiciones, y a ella le insinuó un trío y le dio un beso en la boca sin consentimiento.
"Sabor extraño" en la bebida
También relató que su amiga, que iba "bien", se empezó a encontrar mal, el hombre la acompañó a un sofá, y allí, presuntamente, la tocó sin consentimiento.
La otra chica, que aún no había cumplido los 18, aseguró que pidió un refresco pero notó un "sabor extraño" en la bebida y se sintió indispuesta.
Dijo que el hombre la acompañó al sofá y allí le tocó por dentro del pantalón en la zona íntima. "Me quedé en shock, reaccioné y lo aparté", sostuvo.
Confirmó también el beso del acusado a la amiga y que esta le apartó.
Las chicas aseguraron que el hombre les ofreció 150 euros a cada una por un trío. Ellas grabaron sus conversaciones en el baño y, posteriormente, las que mantuvieron la barra del local con el procesado.
El acusado asegura que la denuncia es "surrealista"
El acusado negó los tocamientos y que besara sin consentimiento a la otra mujer y dijo que fueron ellas las que propusieron el trío. El único testigo, por parte de la defensa, exnovio de la mayor de las mujeres, acusó a esta de "mentirosa patológica".
Las acusaciones sostuvieron que hay prueba de cargo suficiente para condenar al acusado y desacreditaron la versión del ex por su "animadversión" hacia la chica.
La defensa, por su parte, ha dado validez al testimonio del chico y ha incidido en que las mujeres ofrecieron "hasta 4 versiones diferentes" y que su relato no está reforzado con otras pruebas, por lo que, en su opinión, "no queda desvirtuada la presunción de inocencia".
El acusado hizo uso de la última palabra para asegurar que era una denuncia "surrealista" y que le da "mala fama" al bar.




