La historia de los restos del monasterio de la Illa de Tambo que derribó el corsario Francis Dracke

La Asociación Irmandade de Tambo asegura que encontró restos arqueológicos que asegura son de enorme importancia en la Illa de Tambo. Hallazgos que ya fueron puestos en conocimiento del Servicio de Patrimonio de la Consellería de Cultura.

Esta asociación encontró restos de muros y paredes, en dos zonas diferenciadas, que en uno de los casos podría corresponder con el lugar ocupado por el Mosteiro de Santa María de Graza, construido en el siglo VII y derribado a finales del siglo XVI por las tropas del corsario inglés Francis Dracke.

Este hallazgo sería una gran aportación para incrementar el valor patrimonial de este enclave. La Asociación Irmandade Illa de Tambo pide que la isla debería clasificarse como BIC, Bén de Interés Cultural.

Cuenta la historia que en el siglo VII San Fructuoso fundó un pequeño monasterio en Tambo que posteriormente pasó a ser priorato dependiente de los benedictinos de San Xoán de Poio. Doña Urraca lo donó en 1116 a este monasterio que se mantuvo la desamortización del año 1835. En 1589 el pirata Dracke entró en la ría de Pontevedra y destruyó el cenobio siendo arrojada al agua la imagen de su patrona Santa María de Graza. Según la tradición fue después recogida por los pescadores de Combarro y trasladada al actual santuario da Virxe da Renda, en el que todavía se venera.

Desde la firma del convenio de cesión por parte del Ministerio de Defensa en marzo de 2022, independientemente del proceso de ENIL, hay cuatro cuestiones que son urgentes acometer y que, según la Asociación Irmandade Illa de Tambo no admiten más demora, como completar el mapa arqueológico de Tambo; diseñar un plano de gestión del eucaliptal, especies invasoras y retirada de desechos de la etapa militar; mejorar la seguridad del muelle y de la senda peatonal y, finalmente, un plano básico para asegurar las estructuras de los edificios existentes.

La Asociación Irmandade Illa de Tambo afirma que desde que en la última comisión de seguimiento de la isla en la que el Concello de Poio dio un impulso a la figura de ENIL, nada se sabe y que además es importante que el equipo redactor cuente con un arqueólogo.