El Celta aprovecha la superioridad numérica para arrasar al Villarreal

Vigo

Coser y cantar para el Celta ante el rival más complicado que le quedaba en casa. Un encuentro muy igualado hasta la expulsión de Bailly; desde ese momento, los vigueses dominaron el balón a su antojo y lograron la victoria más tranquila de la temporada con un contundente 3-0.

Hasta seis cambios con respecto al partido del Barcelona introdujo Claudio Giráldez, que mantuvo en el once a Borja Iglesias, quien tuvo la primera ocasión con un tiro con la izquierda dentro del área que mandó a córner Luiz Júnior. Pasaban los minutos y el partido estaba espeso, con poco ritmo. Pudo romper el tedio Fer López, que recibió un pase solo dentro del área, hizo un mal control y su disparo lo desvió in extremis Kambwala.

Apuntaba a que no habría goles en el primer tiempo, pero todo cambió en el minuto 37. Bailly se tira al suelo para derribar a Alfon cuando se disponía a encarar la portería rival y el colegiado Alberola Rojas no dudó en mostrarle la tarjeta roja directa. Aprovecharon los celestes a la perfección esta circunstancia. Al filo del descanso, Beltrán hizo bueno un mal centro de Mingueza poniendo un pase al área que Fer López empujó a la red a placer.

Segunda parte tranquila

Tras el paso por los vestuarios, Ilaix entró por Beltrán y le dio al equipo vigués el empuje definitivo para volcarse ante la portería rival. El mediocentro rozó el tanto con un latigazo desde la frontal del área que pegó en el poste; el rechace lo cazó Borja Iglesias, que fusiló al portero rival. Con 2-0 el choque quedó finiquitado porque la reacción del Villarreal era nula.

El Celta coleccionaba ocasiones, especialmente en las botas de Aspas e Ilaix. Precisamente, el guineano provocó un penalti con una gran acción individual. El 'Príncipe de las Bateas' no falló desde los once metros e iguala con 9 goles al Panda. Fiesta final en Balaídos y el sueño de Europeo cada vez está más cerca. Los de Giráldez dormirán esta noche en el séptimo puesto.