La conselleira de Vivenda asume el fracaso del teléfono para denunciar okupaciones: "Recibimos pocas llamadas"

Santiago de Compostela

La Xunta mantiene sus críticas a la Ley estatal de vivienda porque favorece a los que denomina "inquiokupas". El gobierno gallego activó en 2020 el conocido como teléfono antiokupas para hacer frente a un problema que, sostiene aún a día de hoy, es real. Los datos demuestran que las denuncias por este motivo son escasas -en 2024 el teléfono recibió sólo tres llamadas al respecto-, algo que ahora reconoce la conselleira de Vivenda. Martínez Allegue asegura que "las llamadas son muy diversas, no sólo por okupaciones o lanzamientos", aunque insiste en que el hecho de que "no sean muchas no quiere decir que no existan".

En cuanto a las medidas para atajar el problema de la vivienda, la Xunta rechaza el intervencionismo, por lo que cuestiona la intención del ejecutivo compostelano de gravar los inmuebles vacíos. Allegue La se muestra crítica con el incremento del IBI a los propietarios de estas viviendas. La conselleria considera que esta vía de recarga fiscal no es la adecuada para poner más inmuebles en el mercado y solucionar los problemas de acceso a una vivienda.

En entrevista en la SER, la responsable de Vivenda ha avanzado que casi con toda probabilidad la Xunta le dará el visto bueno a la petición de la ciudad de A Coruña para ser declarada zona residencial tensionada y así poder limitar el precio de los alquileres. Cuenta con que sea pronto, en cuanto el ayuntamiento presente la documetación adicional que le han pedido.

De cara a las elecciones municipales de 2027, la conselleira, natural de Pontevedra, se descarta para ser la candidata del PP a la alcaldía de la ciudad del Lérez.