Aspas lidera el regreso del Celta a Europa

Vigo

Con más sufrimiento del esperado, el Celta cumplió con el guion establecido y venció por 1-2 al Getafe, logrando de esta forma el séptimo puesto y la clasificación para la Europa League.

Los nervios y la tensión se notaron en los compases iniciales del partido, en el que los vigueses se mostraban imprecisos con los pases. En el minuto 10, Guaita arriesgó demasiado en la salida de balón y dio un mal pase que provocó una pérdida al borde del área. Mayoral recibió un pase de Uche, se hizo un hueco con un buen control y enganchó un tiro cruzado que superó al portero celeste. Ante la presión del conjunto azulón, los de Giraldez optaron por balones en largo y en uno de ellos apareció el tanto del empate. Un envío de Mingueza lo controló Alfon, se la cedió a Aspas, que puso un pase magnífico a Borja Iglesias, quien definió a la perfección ante David Soria.

Con el empate, el equipo vigués se asentó en el partido y redujo los errores en la circulación de balón. Antes del descanso tuvo lugar la primera jugada polémica del choque. Martínez Munuera pitó una falta de Duarte sobre Alfon al borde del área. El VAR avisó al colegiado para asegurarse de que era infracción, ya que en caso de ser así tendría que ser penalti al ser el derribo sobre la línea. Finalmente, el colegiado decidió que no hubo falta.

Dominio celeste tras el descanso

La segunda mitad fue totalmente diferente, con un Celta dominador y generando bastantes ocasiones de gol, especialmente entre los minutos 57 y 60. En ese tramo David Soria se lució para desviar un chut de Alfon que parecía gol. Una jugada que acabó en córner que terminó en un cabezazo de Javi Rodríguez que salió rozando el larguero. Poco después, un remate a bocajarro de Marcos Alonso lo sacó el portero del Getafe con la pierna. La insistencia tuvo premio a falta de diez minutos: un centro pasado de Swedberg lo cazó Aspas llegando desde atrás y con un tiro de primeras con la derecha introdujo el balón en la red. Locura con el gol del capitán que suponía la tranquilidad definitiva viendo que los dos rivales directos no pasaban del empate.

Por si fuera poco, el VAR llamaba de nuevo al colegiado para cambiar una tarjeta amarilla por una roja a Domingos Duarte tras derribar a Pablo Durán cuando era el último hombre. A partir de ahí se acabó el encuentro y comenzó una celebración que seguirá mañana en Vigo a partir de las 19:00 horas en Plaza América. Ahora toca disfrutar y pensar en los rivales del sorteo de la fase de grupos en agosto, soñando con llegar a la final de Estambul.