El selecto Club de los Siete

Vigo

En un club de 102 años de vida han pasado muchos entrenadores que, de una forma u otra, forman parte de la historia del Celta. Desde las finales de Copa que lograron Ricardo Zamora, Txetxu Rojo y Víctor Fernández, pasando por nuestro primer entrenador Mr Cuggy, el doble ascenso de Pavic, Mr Addison y el ascenso de Sestao, el autobús de Maguregui o el casi Eurocelta de Novoa. Sin olvidarnos de Luis Pasarín y otras soluciones caseras como Pepe Villar, Moncho Carnero o Félix

Pero solamente hay unos pocos elegidos en el selecto club de los entrenadores europeos del Celta. Aquellos que, por sus grandes méritos en la liga, lograron meter al Celta en competición continental. Desde ayer tenemos un nuevo socio de ese selecto y exclusivo club europeo celeste del que formará parte Claudio Giráldez. Ahí comparte nombre con Juanito Arza, Jabo Irureta, Víctor Fernández, Miguel Ángel Lotina, Fernando Vázquez y Toto Berizzo. El Club de los Seis pasa a ser el Club de los Siete por la hazaña realizada por el técnico porriñés con este imberbe pero descarado Celta 24-25.

Honores en el Club de los Siete para un ilustre sevillano y sevillista que fue el primero en romper el techo de hormigón más que de cristal: Juanito Arza. Arza cogió al Celta casi en descenso a falta de siete jornadas y lo salvó de una muerte casi segura. Al año siguiente lo metió en Europa con mucha gente de la casa como Rodilla, Doblas, Manolo, Jiménez, Santi Castro o Quique Costas. Era la temporada 70-71 y el Celta logró su primera clasificación para la Copa de Ferias. Duró poco la alegría porque el Aberdeen le eliminó en la primera ronda.

Hubo que esperar 27 años para lograr la siguiente. Estaba Jabo Irureta en el banquillo y el técnico vasco logró cambiarle el chip al Celta. Asentó las bases de un Celta que tenía ambición y que quería dejar de sufrir tanto. Daban un paso al frente jugadores con gen ganador como Mazinho, Mostovoi, Karpin, Cadete o Revivo que mostraron sus ganas de luchar por otros objetivos. Era la temporada 97-98 y el Celta logró meterse en la UEFA. Pero Jabo decidió aceptar una irrechazable oferta del Deportivo y no pudo disfrutar el EuroCelta. Llegó Víctor Fernández, el técnico milagro del Zaragoza europeo y de la final de Copa del 94 que tanto nos había dolido.

Con él llegó el fútbol de salón, ser líderes en la Liga, el título de la Intertoto, otra final de Copa y ser el mejor equipo del mundo en el ranking FIFA. También las victorias europeas contra Liverpool, Aston Villa, Benfica o la Juventus que hincaron la rodilla ante aquel inolvidable fútbol del Celta al que le faltó un título para hacerle justicia a lo que desplegaba en el verde.

Pero las numerosas clasificaciones para Europa siempre se quedaron a las puertas de poder disputar, por primera vez en la historia del club, la Liga de Campeones. No fue hasta la llegada de Miguel Ángel Lotina cuando se consiguió. Nadie daba demasiado por el de Meñaka, pero su pragmatismo, capacidad de sufrimiento y fútbol muy vertical y de contragolpe, llevaron al Celta a meterse entre los elegidos. A Lotina le debemos el haber podido escuchar la musiquita de la Champions en Balaídos, la victoria en San Siro al Milan de Ancelotti o la victoria contra el Ajax de Koeman en Balaídos.

Fernando Vázquez logró un doble éxito. De esos que pasan pocas veces. Subir al Celta en un año y meterlo en Europa al siguiente. Aquel Celta con David Silva, Canobbio, Oubiña, Gustavo López o Baiano que tenía un carácter competitivo muy acentuado. Fue en la temporada 2005-2006 cuando el Celta logra retornar a Europa y estuvo a punto de poder meterse en la Champions. Estuvo hasta las últimas jornadas con posibilidad real de meterse entre los cuatro primeros.

Desde la eliminación en Bremen en marzo de 2007, el equipo se pasó un lustro en segunda y, después, intentando asentarse en Primera División. Algo que logró con Herrera, Abel Resino o Luis Enrique. Hasta que llegó el Toto Berizzo y le añadió un punto más de ambición. De su mano llegó una nueva clasificación europea en la temporada 2015-2016. El Celta regresaba 9 años después a la Europa League y logró además llegar hasta semifinales. Nunca antes había pasado el club celeste de cuartos de final. Les había eliminado el Marsella, el Lens y el Barcelona. Pero en 2017, el Celta de Berizzo logró ganar al Genk y plantarse en semis.

Y ahora le toca al joven Claudio Giráldez. Lo hace con una receta entre “Totista”, “Arzista” y “Victorfernandiana”. Importa el qué pero también el cómo. También tuvieron mucho mérito Jabo, Loti o Vázquez. Pero Claudio ha conseguido un equipo de autor, de esos que gustan a la gente de otras ciudades y de otros equipos. Es el Barça de Flick o Pep, el Athletic de Bielsa o más recientemente la Real de Imanol o el Girona de Míchel. Claudio ha hecho historia y hay que disfrutarlo. Ya forma parte del selecto Club de los Siete.