El éxodo de los delanteros celestes

Vigo

Mucho se habla de la defensa del Celta y poco de la delantera. Una metamorfósis completa es lo que está viviendo, en las últimas campañas, la parte ofensiva del equipo. Pero, en el último año, ese proceso se ha acelerado vertiginosamente. En los últimos encuentros de la pasada campaña, podíamos ver en algún once o saliendo del banquillo a Jurgen Strand Larsen, Carles Pérez y Miguel Rodríguez. Y esto sin contar a Gonçalo Paciencia al que se había cedido en el arranque de la 23-24 porque Benítez no contaba con él. Larsen fue vendido por Jorge Mendes al club donde Jorge Mendes tiene intereses (Wolves) a cambio de 30 millones, que después resultó que fueron 3 de cesión y 27 de compra obligatoria. El Celta se quedaba sin su delantero titularísimo de los dos últimos años, aunque era entendible la operación que duplicaba el precio pagado por los celestes por su traspaso.

También se decidió ceder a Miguel Rodríguez al Utrecht, ex equipo de Douvikas, para que pudiese foguearse en la Eredivisie. El Celta tenía tan poca confianza en su explosión como jugador que solamente le puso 1,5 kilos de opción de compra. La temporada de Miguel fue espectacular con 7 goles y 5 asistencias en su debut en Países Bajos, con doblete incluido en la victoria contra el Ajax. Ya se habló de interés de PSV y de otros equipos y el Utrecht ejecutó rápidamente la cláusula.

El Celta tampoco contaba con Carles Pérez y, pese a que el entrenador dijo en agosto que, si no venía un extremo derecho contaba con el catalán, el club decidió equilibrar el límite salarial ahorrándose parte de la ficha. Y así fue con su cesión al Getafe.

En enero de este mismo año, el Celta también decidió aligerar la plantilla y el límite salarial en una operación arriesgada porque dejaba a Claudio Giráldez sin efectivos en ataque. Además de la baja de Aidoo en defensa, que esa ya se contaba con ella, el club decidió desprenderse de Jo Bamba, segunda ficha más alta del club, para intentar equilibrar las cuentas. También se desprendió de Tadeo Allende por el que había pagado más de 5 millones de euros el anterior enero por su traspaso. Y otro jugador que se podía mover de media punta o por banda izquierda, Luca de la Torre, también se le buscó una salida. Los tres a un mercado conocido por Marco Garcés, la MLS norteamericana en donde sus fichas no supondría problema alguno.

Pero había otra bomba de relojería el último día de mercado. En una buena operación económica, el Celta traspasaba al Como de Fábregas a Anastasios Douvikas por casi 15 millones de euros. Fue el último día de mercado y se quedaba solamente con un delantero (Borja) para afrontar toda la segunda vuelta. Intentó el último día la cesión de Cris Ramos, pero el Cádiz dijo no.

Ahora llega el final de la temporada 24-25 y el Celta ya ha vuelto a soltar lastre en la delantera, su parte más variable, más voluble y más inestable. La primera baja fue Iker Losada, de regreso al Betis tras una cesión de media temporada con un rendimiento bastante insuficiente. La segunda baja, todavía no oficial, fue la de Alfon. El delantero albaceteño dio un paso al frente en diciembre, al igual que Pablo Durán, cuando el Celta ya pensaba en el adiós invernal de los Bamba, Allende y Luca. Alfon tenía un precontrato invernal con el Sevilla y tenía claro su marcha al club hispalense por el triple de lo que ganaba en el Celta.

Pero la sorpresa llegó con el traspaso relámpago de Fer López. Jorge Mendes tenía prisa por cerrarlo y por venderle el favor al presidente del Wolves por poder ficharlo por 20 y no por 40, cuando fuese jugador del primer equipo a todos los efectos. Y así fue. Una operación que se puede cerrar en unos 23 millones de euros. Ni 20 ni 25. Ya llegaron las rebajas.

El caso es que el Celta, solamente en junio, ha perdido a Alfon, Iker Losada y Fer López. Y Borja Iglesias regresa al Betis y habrá que negociar con él. En enero perdió a Bamba, Douvikas, Luca de la Torre y Allende. Y en junio del año pasado a Strand Larsen, Carles Pérez, Miguel Rodríguez y Paciencia. Los jugadores de ataque pasan y siempre quedará Iago Aspas. Pese a aquello de Benítez en agosto de 2023 hablando de la edad biológica, Aspas logró esta temporada 10 goles y 5 asistencias en Liga. Ahora necesita compañeros de ataque y, el Celta, buscar a un nuevo heredero ya que Fer López ha dicho adiós. Como Brais y como Gabri Veiga. Toca recomponer el ataque. Un mercado más, un año más.