Vigo lidera la batalla judicial contra Stellantis: 3.200 demandas por los motores PureTech defectuosos
La asociación de afectados asegura que Stellantis conocía el fallo de diseño desde el principio pero hizo "la vista gorda"

Planta de Stellantis EFE/Javier Cebollada / Javier Cebollada (EFE)

La Asociación de Afectados por los motores defectuosos de Stellantis (Afestel) ha dado por rotas las negociaciones con el fabricante y presentará 3.200 demandas de conciliación antes de que finalice julio.
Esta decisión llega tras meses de contactos infructuosos con Stellantis, que, según la asociación, se niega a indemnizar a la mayoría de las más de 700.000 personas en España afectadas por fallos en el propulsor PureTech.
La importancia de Vigo en este proceso es crucial, ya que los juzgados de la ciudad se han convertido en el epicentro de la estrategia judicial de los afectados.
Un problema conocido y generalizado
El problema radica en el motor PureTech 1.2 de tres cilindros, instalado entre 2013 y 2022 en modelos populares de Peugeot, Citroën, Opel y DS. Afestel asegura que, incluso los fabricantes de las correas de distribución implicadas, han confirmado que Stellantis conocía el fallo de diseño desde el principio y, sin embargo, hizo "la vista gorda".
Las consecuencias para los propietarios han sido graves, con reparaciones que han llegado a costar hasta 8.000 euros. A pesar de que Stellantis ha comenzado a revisar el estado de las correas en algunos vehículos, la asociación califica las condiciones de "leoninas" y denuncia que en la mayoría de los casos el coste de la reparación, cercano a los 1.500 euros, recae directamente sobre el cliente.
Miles de afectados buscando justicia
Afestel ya representa a más de 9.000 personas y calcula que otras 8.000 han contactado para sumarse a la demanda colectiva. La frustración es palpable entre los afectados, que se sienten desatendidos ante la falta de respuestas y el mal funcionamiento de la plataforma de reclamaciones habilitada por la empresa.
Aunque la compañía ha reembolsado al menos 170.000 euros en acuerdos extrajudiciales desde marzo, con una previsión de alcanzar los 2,5 millones, los afectados insisten en que las indemnizaciones deben extenderse a todo el colectivo, buscando una compensación justa para todos los perjudicados por estos motores defectuosos.




