Un incendio calcina un edificio de tres plantas en pleno centro de Pontevedra durante la madrugada

La ciudad de Pontevedra se recupera del susto que se vivió la pasada noche por un incendio en el edificio del número 4 de la calle Marqués de Riestra. Las llamas afectaron a toda una edificación de dos plantas, en donde vivían un total de 20 vecinos que tuvieron que ser realojados. Por suerte no hay que lamentar daños personales a mayores de quemaduras superficiales.

En lo referido a la última hora del incendio, el Concello de Pontevedra informó que el edificio ya fue inspeccionado por el servicio de arquitectura, y se acordó la demolición del pinche del mismo para evitar que colapse. Unas obras que se efectuarán el miércoles por la mañana, esperando que entonces el incendio este totalmente sofocado. Por este motivo, el concello ordenó el desalojo de los edificios linderos por seguridad hasta que se puedan inspeccionar las medianeras.

Sobre todo el suceso informó en la mañana del martes la concelleira de Seguridade Cidadá, Eva Vilaverde, quien estuvo durante toda la noche supervisando la situación. Así, el incendio comenzó sobre la una y cuarto de la madrugada y en apenas minutos hubo que desalojar tanto el edificio afectado como los colindantes, un total de cinco, todos ubicados en la calle Riestra.

Horas más tarde, cuando pasaban pocos minutos de las seis de la madrugada, los bomberos dieron por controlado el fuego e invitaron a los vecinos desalojados por precaución a volver a sus casas. Apenas una hora y media más tarde las llamas se reactivaron al haber en la estructura y cubierta materiales inflamables como panel sándwich y madera. De hecho, una parte interior, una escalera de madera, colapsó durante ya la mañana del martes. Así, las constantes reactivaciones de las llamas obligaron a que los bomberos siguieran trabajando en la zona durante horas.

En lo que se refiere a los vecinos del propio edificio afectado, los inquilinos del primer piso, en régimen de alquiler, fueron reubicados en otra vivienda del mismo propietario: su casero. Por su parte, los vecinos del segundo piso, el más afectado, fueron realojados en dependencias municipales. Se trata de los más damnificados por el fuego, que tuvieron que abandonar sus viviendas sin coger apenas nada de sus pertenencias. De esta forma, Eva Vilaverde afirmó que desde el Concello de Pontevedra les darán apoyo hasta que puedan “echar a andar de nuevo”.

A pesar de que la concelleira de Seguridade Cidadá confirmó que existen varias hipótesis, todavía no está confirmada la causa del fuego, pero sí que se originó en el segundo piso, el más afectado por las llamas.

La actuación para sofocar las llamas corrió a cargo de los Bomberos de Pontevedra, que se vieron obligados a solicitar ayuda a los parques de Ribadumia y Cangas do Morrazo debido a la gravedad de los hechos.