¿Por qué nos da tanta vergüenza hablar de dinero?

A Coruña

“Casi sé que he nacido para ser millonaria”. Suena a meme, pero también a deseo muy real. Porque lo cierto es que, aunque nos encantaría tener billetes para irnos “un día por Mumbai y el sábado en Malta”, la realidad es otra. Y hoy, en En Resumidas Cuentas, con Lucía Nieto y Berni Galeana, nos preguntamos algo muy básico pero muy necesario: ¿por qué nos da tanto palo hablar de dinero?

El sueldo, ese gran misterio

Empezamos por una escena que seguro te suena: entras a una entrevista de curro, todo bien, te preguntan por tus aficiones, tu experiencia… Y al final: “¿Tienes alguna pregunta?”

Tú por dentro: Sí, ¿cuánto voy a cobrar?

Pero por fuera: “No, todo claro, gracias :)”

¿Por qué nos cuesta tanto hablar de pasta? Pues porque seguimos viendo el dinero como un tema casi prohibido, como si preguntar por el sueldo fuera de mala educación. ¡Spoiler! No lo es.

Nadie nos enseña a gestionar nuestro dinero

Otro problemón: la falta de educación financiera. Nos enseñan a hacer integrales pero no a leer una nómina. No sabemos cómo ahorrar, cómo funciona una declaración de la renta o por qué es importante revisar los gastos del mes.

Aprendemos todo a las bravas: cuando nos llega el primer alquiler, cuando nos sorprende la primera factura, o cuando abrimos la app del banco y nos da miedo ver el saldo. (Sí, todos hemos puesto lo de "no mostrar el monto al entrar").

Y claro, si no sabes cómo usar el dinero, olvídate de ahorrar o invertir. Te pilla la vida sin manual.

Hablar de dinero = tener poder

Otra cosa: hablar de dinero también es una forma de defender nuestros derechos. Si no sabes lo que cobra tu compi por el mismo trabajo, ¿cómo vas a saber si te están pagando menos? Pero claro, nos da vergüenza preguntar.

Pasa lo mismo con cosas como La Resistencia: ¿Cuáles son las preguntas más incómodas? ¿Sexo? ¿Dinero? Pues el dinero siempre gana como tema tabú. Porque se habla tan poco que nos pone nerviosos hasta entre amigos.

Comparación, presión y expectativas

Muchas veces no decimos que vamos justos de pasta porque no queremos parecer "los pobres del grupo". Pero la realidad es que en cada grupo hay sueldos muy diferentes, y no pasa nada.

¿Te suena lo de organizar regalos de cumple y no saber cuánto poner? ¿O tener que decir que no a un plan porque no llegas a fin de mes? Pues eso. A veces solo falta empatía y adaptarse un poco a lo que puede cada uno.

Rompamos el tabú (y aprendamos a organizarnos)

Lucía y Berni lo tienen claro: el dinero es una herramienta, no un tema oscuro del que no se puede hablar. No se trata de contarle a todo el mundo lo que tienes ahorrado, pero sí de poder hablar de estos temas con tu círculo, sin vergüenza ni miedo.

¿Que no puedes ir de cena todos los findes? No pasa nada.

¿Que no sabés si pedir un aumento? Preguntá.

¿Que te da vergüenza abrir la app del banco? Pues organizate, que todo se aprende.

“Nunca sabes a quién le vas a ayudar a que le suban el sueldo solo por empezar esa conversación.”