Hallan en Tomiño vestigios de un fortín del siglo XVII
Se ha localizado un sistema de defensa con dos fosos y una contramuralla


Los últimos trabajos arqueológicos en la fortaleza de As Torres, en Tomiño, sugieren que este enclave del siglo XVII no era solo una batería, sino un fortín estratégico diseñado para contener una posible invasión portuguesa.
La excavación, que se realiza en el marco de un campo de trabajo de jóvenes impulsado por la Xunta, está desvelando importantes detalles sobre la función y construcción de este yacimiento.

As Torres en Tomiño

As Torres en Tomiño
La arqueóloga e historiadora Rebeca Blanco-Rotea ha explicado que los primeros hallazgos apuntan a que el fuerte se construyó principalmente en tierra, con algunas zonas revestidas de piedra, usando materiales locales como granito y cantos rodados del río Miño.
Una defensa con historia
Este fortín se ubicó en un punto clave para controlar las principales rutas que unían Tui, A Guarda y Baiona. Su estructura defensiva incluía un acceso con un parapeto que, se cree, sostenía una empalizada de madera para ocultar el interior del recinto.
Uno de los descubrimientos más sorprendentes es un sistema de defensa con dos fosos y una contramuralla. Los investigadores consideran que estos fosos fueron construidos a partir de antiguas trincheras romanas de explotación de oro, adaptadas para la Guerra de Restauración portuguesa.
La excavación continuará en los próximos meses con el objetivo de comprender mejor las técnicas constructivas y la organización interna de este fortín.




