La mirada de Jorn Lucas: Sanidad pública

A Coruña

Ningún sistema sanitario funciona sin problemas. Pero creo que aquí en Galicia no tenemos demasiadas razones para quejarnos del Sergas. El mes pasado vi de cerca cómo un buen amigo fue atendido en cuestión de semanas. Aún le queda camino, pero por ahora me parece todo asombroso.

Hoy en los Países Bajos, en un día que se llama Prinsjesdag, se inaugura el curso político. Ocurre tras un discurso del rey, después de que él y la reina recorran la ciudad de La Haya en una carroza.

La pompa es solo el adorno de lo importante: los planes del gobierno. Pero incluso eso hoy no tiene mucho sentido, igual que el espectáculo real, porque el mes que viene habrá elecciones.

Aun así quiero comentar un plan. Si depende de este gobierno, la prima mensual mínima de un seguro de salud obligatorio subirá hasta casi 2.000 euros por persona y por año. Para los hijos a partir de los 18 años, para los jubilados y también para los mayores. Con ese dinero no basta, porque con el copago obligatorio de casi 400 euros todavía hay que pagar mucho más de tu propio bolsillo.

Pero no hay otra opción que afiliarse a una empresa privada con ánimo de lucro.

Que aquí en España podamos contar con una sanidad pública, que todos financiamos a través de los impuestos, es algo que damos por hecho sin pensar demasiado. Igual que no somos del todo conscientes de lo caro que tiene que ser este sistema. No tengo cifras exactas, pero seguramente son muchos miles de millones de euros.

Yo, personalmente, contribuyo con gusto a mantener la sanidad pública. Cuantos más paguemos la factura, menos pesará el coste sobre cada uno. ¡Viva la sanidad pública!