Ecosystems 2030: cambiar la mentalidad para afrontar los retos de la inteligencia artificial

A Coruña

El foro internacional Ecosystems 2030 ha arrancado en el Palacio de Exposiciones y Congresos (Palexco) de A Coruña con un mensaje claro: la inteligencia artificial ya está transformando nuestras vidas y exige un cambio de mentalidad para afrontar los desafíos que plantea. Medio centenar de expertos de todo el mundo se han reunido para debatir sobre el impacto de esta revolución tecnológica en ámbitos tan diversos como el trabajo, la medicina, las finanzas o la educación.

“Competimos contra el intelecto, no contra el trabajo manual”

En la inauguración, el presidente ejecutivo de Ecosystems 2030, Omar Hatamleh, alertó de que “por primera vez estamos compitiendo contra el intelecto y no contra el trabajo manual”. Subrayó que la IA está en una fase inicial, pero en pocos años será capaz de realizar razonamientos complejos y desempeñar funciones en todas las industrias. En una tercera etapa, incluso los robots humanoides podrán desarrollar tareas manuales.

Hatamleh insistió en que, aunque los beneficios son evidentes, también existe un riesgo: “Estamos empezando a ver una bajada en el pensamiento crítico de los seres humanos, es muy peligroso”. Por ello, pidió aprovechar la tecnología “sin que afecte a la esencia del ser humano” y resumió el reto en una frase: “Para poder adaptarnos tenemos que cambiar de mentalidad”.

Galicia, en el mapa de la innovación

El conselleiro de Educación, Román Rodríguez, destacó el papel de Ecosystems 2030 para situar a Galicia en el mapa tecnológico en un momento de “profundo cambio”. Subrayó que la sociedad se divide entre quienes temen a la tecnología y quienes están obsesionados con ella, y defendió la necesidad de encontrar “equilibrio y control”.

La alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, recalcó que la IA es “una transformación sin precedentes” que interpela a personas, instituciones y sociedades. Insistió en que no está para sustituir al ser humano, sino para ayudarlo, y remarcó la importancia de educar y regular estas herramientas.

Los negocios del futuro: asistentes virtuales

La vicepresidenta ejecutiva de Mastercard, JoAnn Stonier, apuntó que “la tecnología tiene un impacto en la humanidad más profundo que cuando el fuego o la electricidad”. En su opinión, la clave está en la velocidad con la que se está desarrollando. “Empezamos a hablar de IA en 2022 y ya tenemos coches que vuelan o sillones que transfieren datos biométricos a un médico”, señaló.

Stonier anunció que los asistentes virtuales serán cada vez más comunes en los negocios, con usos que van desde la gestión de compras hasta la planificación de viajes. Como ejemplo, presentó Agent Pay, un servicio de Mastercard que permite a asistentes de IA completar transacciones en nombre de los usuarios.

IA y satisfacción laboral

Desde HP, Guayente Sanmartin, presidenta de la división PS Commercial Systems, presentó un estudio que revela que los trabajadores que utilizan IA en su día a día están un 42 % más satisfechos que quienes no lo hacen. “Las empresas con empleados realizados tienen mejores resultados”, señaló.

Sanmartin relató cómo herramientas como las transcripciones automáticas o los resúmenes de documentos han reducido drásticamente tareas rutinarias: “Esto nos ahorra meses de trabajo”. En su opinión, con las herramientas adecuadas, el trabajo “no tiene por qué percibirse como trabajo”.

Un robot para revolucionar la construcción

El vicepresidente sénior y director de robótica móvil de All3, Giuseppe Napo Montano, presentó el robot Mantis, diseñado para transformar el sector de la construcción y dar respuesta a la crisis de vivienda. Según explicó, Europa necesita 9,6 millones de hogares, pero los altos costes hacen insostenible el sistema actual.

Mantis puede diseñar y ensamblar edificios de manera más rápida y precisa, realizar tareas como taladrar o pintar, e incluso llevar a cabo inspecciones y controles de calidad. Estos robots trabajan 24/7 y permiten hacer en un día lo que antes llevaba de 3 a 6 meses. Además, reducen un 25 % las emisiones de CO₂, son un 50 % más rápidos y un 30 % más baratos. “No es un robot, estamos intentando rediseñar quién tiene un techo sobre sus cabezas”, concluyó Napo Montano.