Adiós al estrés felino y al sofá destrozado: el rascador como aliado en el hogar
Veterinarios de Vigo destacan las seis claves para mejorar la salud emocional y física de los gatos domésticos

Dos gatos adoptados en su nueva casa / Víctor Rodríguez

Para los miles de hogares vigueses que comparten su vida con un gato, existe un objeto que se alza como pilar fundamental para la salud y el equilibrio emocional de sus mascotas: el rascador. Lejos de ser un mero capricho, veterinarios y especialistas en bienestar animal insisten en que este elemento es esencial para canalizar instintos naturales, proteger el mobiliario y garantizar una vida plena al animal, especialmente a aquellos que no salen al exterior.
La conducta de rascado, completamente instintiva, ofrece una amplia gama de beneficios. Estos son los seis beneficios principales de contar con un rascador para los gatos de casa:
Mantenimiento de uñas saludables: Al rascar, el gato elimina las capas externas de sus garras, previniendo el crecimiento excesivo, las roturas dolorosas y las uñas encarnadas, un problema frecuente en gatos de interior con poca actividad.
Tonificación muscular y flexibilidad: Cada zarpazo es un ejercicio completo que implica la extensión de tendones y articulaciones. Esto ayuda a mantener la agilidad, la fuerza y la flexibilidad, combatiendo la vida sedentaria.
Reducción del estrés y la ansiedad: Rascar es una actividad profundamente relajante. Proporcionar un lugar específico para liberar esta energía ayuda a evitar la acumulación de tensión y reduce los signos de ansiedad, mejorando el estado de ánimo general del felino.
Comunicación y seguridad territorial: Los gatos utilizan el rascador para marcar con señales visuales y, lo que es más importante, olfativas a través de las glándulas interdigitales. Esta acción refuerza su sentido de pertenencia y aumenta su seguridad en el entorno doméstico.
Estímulo mental y actividad física: Los rascadores más elaborados, como torres o estructuras con juguetes integrados, convierten el rascado en una sesión de juego enriquecedora. Esto promueve el ejercicio, combate el aburrimiento y ayuda a prevenir problemas como el sobrepeso.
Espacios de descanso y observación: Muchos diseños incorporan plataformas y casitas. Ofrecer zonas elevadas de descanso y observación satisface la necesidad del gato de controlar su entorno desde una posición segura, promoviendo un mejor descanso.
Consejos para elegir el rascador perfecto
Los profesionales subrayan que la eficacia del rascador depende en gran medida de su elección y ubicación. Es crucial considerar la edad, el tamaño y el carácter del gato. Mientras que los gatos más jóvenes disfrutan con estructuras que combinan juego y escondites, los adultos suelen preferir opciones que les permitan estirarse completamente o tumbarse en altura.
Además, la ubicación es vital. El rascador debe colocarse en zonas de uso frecuente o donde el gato ya haya intentado rascar, como cerca de su cama, al lado de una ventana o en un área de paso habitual. La gran variedad de diseños actuales, desde opciones compactas a complejas torres de actividad, facilita su integración en cualquier hogar vigués, asegurando que el felino tenga un lugar apropiado para satisfacer su instinto.
Como concluyen los veterinarios: "Un rascador adecuado no solo protege el sofá y las alfombras, sino que es una herramienta esencial para mantener la salud física y emocional de nuestros compañeros. Los gatos con acceso a ellos se muestran más activos, relajados y con menos signos de ansiedad."




