El Baltasar Pujales no acogerá partidos en casa durante las obras de reforma en las gradas

Vigo

Finalmente y tras demasiado tiempo esperando, el Concello de Vigo iniciará las obras de reforma en la grada del Baltasar Pujales donde juega el Rápido de Bouzas, uno de los clubes históricos de Vigo con más de cien años de historia.

Después de que la cubierta de la grada se desprendiese durante una tormenta, el Concello de Vigo, propietario de las instalaciones, retiró la parte desprendida y colocó una red de seguridad para evitar que se pudieran producir más accidentes, cerrando también la parte de la grada situada inmediatamente debajo de la cubierta desprendida.

Sin embargo, la medida era provisional y el próximo lunes día 13 de octubre se iniciará la reforma de la grada, una obra que tendrá una duración de unos cuatro meses, según el calendario anunciado desde Praza do Rei.

Sin embargo, las gradas del Baltasar Pujales no solamente acogen los asientos para que los espectadores puedan disfrutar de los partidos, sino que debajo también están las oficinas, la sala de material, aseos y los vestuarios, por lo que durante los meses que duren las obras, esta parte de las instalaciones también quedarán cerradas.

Reestructuración de la actividad diaria

Esto ha obligado al club a reestructurarse para acoger estos servicios en el resto de instalaciones disponibles y que prácticamente se limitan a la cantina. De este modo, y según ha informado el club aurinegro en un comunicado interno, los usuarios podrán utilizar los baños del Polideportivo Pablo Beiro, ubicado junto al campo de fútbol, para hacer sus necesidades, mientras que los niños de la escuela de fútbol (unos 500 niños) tendrán que ir ya con la ropa de entrenamiento de casa y una pequeña bolsa con las botas, agua y chubasquero como mucho. El club habilitará un espacio para que puedan dejar las mochilas.

Por otra parte, el espacio de la cantina se utilizará para almacenar el material necesario para los entrenamientos por lo que no se permitirá el acceso al interior aunque sí que se podrá consumir en la terraza. En cuanto a la oficina, quedará cerrada durante el tiempo que duren las obras, si bien en la cantina se habilitará un espacio para que se pueda atender a las familias que lo necesiten.

Sin embargo, el principal efecto de las obras sobre la actividad normal del club está en que durante la obra no será posible jugar partidos en el Baltasar Pujales, por lo que desde la organización irán avisando puntualmente de dónde se irán disputando los diferentes compromisos deportivos del club.

Para la resolución de todas las dudas que puedan surgir en torno a este asunto, la dirección del club ha convocado una reunión el próximo viernes 10 de octubre.