El tren cumple 150 años en A Coruña: de la revolución industrial al abandono de las estaciones históricas

A Coruña

Acaban de cumplirse 150 años de la llegada del tren a Coruña. Un 10 de octubre de 1875 se inauguraba el tramo A Coruña-Lugo que permitió conectar dos de las grandes ciudades y supuso un motor económico importante para la comarca de A Coruña. No solo para la ciudad, también para puntos como O Burgo, Cambre, Cecebre o Betanzos, donde hacía paradas esa primera línea.

Con la llegada del tren se podían enviar productos frescos de los ganaderos, agricultores y pescadores de la zona cada vez más lejos, sin necesidad de esperar días a que llegaran. Dos días de viaje hasta Lugo se reducieron a apenas cuatro horas. Xosé Carlos Fernández es ingeniero experto en historia ferroviaria, explica que esa conexión regional supuso un importante crecimiento a nivel económico.

Esas estaciones intermedias han quedado algunas con menos uso, por ejemplo la de Betanzos-Infesta. El PP del municipio denuncia el estado de abandono de la misma y reclama al operador ferroviario ADIF que acometa el mantenimiento y mejora de las instalaciones y del entorno de la misma. Ponen el foco también en el tren de cercanías y piden que la planificación del futuro despliegue de la red incluya a Betanzos.

Hay otra fecha que recordar: el año 1883, ocho años más tarde, cuando ya se unió A Coruña con la meseta. Fue la primera vez que los coruñeses pudieron viajar a Madrid y convirtió a Coruña en la primera ciudad gallega conectada con el resto de la península.

El Concello y el Instituto José Cornide de Estudos Coruñeses están llevando a cabo actividades divulgativas por el 150 aniversario de este hecho histórico, para dar a conocer figuras como Martínez Picabia, impulsor de la concesión en el año 1857, y Celedonio Uribe, ingeniero responsabel del proyecto fueron imprescindibles para que el trazado ferroviario llegase a la ciudad herculina.