El retrato honesto y profundo tras el diagnóstico de cáncer de mama: “No queremos ser víctimas ni heroínas, sólo pedimos normalidad y comprensión”
La Asociación Española contra el Cáncer en Pontevedra lanza la campaña “Nos lo tomamos a pecho” protagonizada por quienes padecen la enfermedad que este domingo conmemora su Día Mundial


En la provincia de Pontevedra el año pasado se han diagnosticado 678 nuevos casos de cáncer de mama y el 22 % de esos casos se dieron en pacientes menores de 50 años. Son datos aportados esta mañana por la Asociación Española contra el Cáncer en Pontevedra que acogió en su sede de la capital un desayuno informativo con personal y pacientes de esta entidad. El cáncer de mama es el tumor más frecuente en la mujer en todo el mundo y en España, según el Observatorio del Cáncer de la Asociación Española, 35.875 mujeres fueron diagnosticadas de cáncer de mama en 2024. Esta enfermedad tiene una supervivencia media a 5 años del 85,5 %.
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Hoy por Hoy Pontevedra (16/10/2025)
Este domingo 19 de octubre se conmemora el Día Mundial y con motivo de esta jornada, se ha presentado esta mañana en Pontevedra la campaña “Nos lo tomamos a pecho”, cocreada y protagonizada por pacientes y supervivientes con cáncer de mama, más allá del diagnóstico y el tratamiento. En este encuentro con los medios de comunicación, las pacientes han explicado cómo es su día a día y las barreras a las que se enfrentan en ámbitos como el laboral: tras el diagnóstico, relatan, es muy difícil volver al trabajo con naturalidad y normalidad. A través de la voz de Carmen García, Ángeles Rubio, Raquel Quintáns, Patricia Martín, Carmen Suage y María José Rosal conocimos aspectos emocionales, la relación con el entorno más cercano o cómo afrontan los aspectos físicos.
La campaña presentada muestra la realidad del cáncer de mama además de pretender difundir y poner de relevancia las necesidades y el compromiso de la sociedad con las personas con cáncer de mama. “No queremos ser víctimas ni heroínas, sólo pedimos normalidad y comprensión”, explican. Todas ellas cuadran en lo mismo, en la dureza del primer diagnóstico cuando “te preocupas más por tu entorno que por ti mismo, pero después desde la Asociación nos prestan una ayuda imprescindible para saber llevarlo lo mejor posible”. Concluyen que en el minuto uno “la vida se para, pero es necesario vivir” y en esa lucha están. ¡Fuerza!




