O Porriño aprueba nuevos pliegos del SAF tras el asesinato de una trabajadora en julio
La empresa adjudicataria deberá efectuar una evaluación completa de los riesgos laborales que afectan a las trabajadoras por un técnico cualificado


El Ayuntamiento de O Porriño (Pontevedra) ha aprobado, en un pleno extraordinario, los nuevos pliegos del servicio de ayuda en el hogar (SAF, por sus iniciales en gallego) casi tres meses después del asesinato de una trabajadora en una de las casas que atendía.
Los pliegos, según señala el Ayuntamiento en un comunicado, recogen que la empresa adjudicataria debe efectuar una evaluación completa de los riesgos laborales que afectan a las trabajadoras en el desarrollo de sus tareas. Esa evaluación deberá realizarla un técnico "debidamente cualificado" en prevención de riesgos laborales.
En el apartado económico, los nuevos pliegos suponen un incremento del 16 % en los precios unitarios por hora, por lo que las tarifas son de 26,17 euros por hora para la modalidad básica y 24,74 euros para la modalidad de dependencia. El nuevo contrato, que entrará en vigor en enero de 2026, tendrá una duración inicial de dos años, con una posible prórroga de uno más, y sale a licitación por un importe total de 2.826.777,60 euros, según explica el Ayuntamiento en un comunicado.
El número de personas beneficiarias del SAF municipal asciende a 137, 10 en la modalidad básica y 127 en la de dependencia. El Ayuntamiento recuerda que la modificación de la Ordenanza municipal reguladora del SAF tendrá en cuenta el contenido de los nuevos pliegos, a la "espera" de la aprobación definitiva del protocolo de seguridad del Instituto de Seguridad y Salud Laboral de Galicia (Issga), que ya cuenta con el visto bueno de la Xunta y ha sido remitido a la Federación Gallega de Municipios y Provincias (Fegamp).
Asesinato de la trabajadora
A finales de julio, Teresa, trabajadora del SAF de O Porriño, fue hallada muerta en un domicilio en el que trabajaba y como presunto responsable del crimen fue detenido el marido de la mujer a la que cuidaba en esa vivienda. El hombre fue ingresado en la unidad de psiquiatría del hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo y el 5 de septiembre la jueza del Tribunal de Instancia de O Porriño decretó su ingreso en prisión provisional -en un módulo terapéutico- investigado por un delito de asesinato, sin perjuicio de lo que depare la causa.
La empresa concesionaria del SAF de O Porriño, Aralia, señaló que el día de su muerte Teresa comunicó que renunciaba al servicio y que les daba quince días para buscar a otra compañera tras haber sufrido acoso en ese domicilio, aunque ya la víspera había advertido de que la relación con el hombre era complicada.
El asesinato provocó una oleada de rechazo en Galicia, con una huelga en el SAF y concentraciones en 80 municipios para solicitar unas condiciones laborales seguras para el personal de este servicio, integrado mayoritariamente por mujeres.




