A Coruña Opina: así chocan PP, BNG y PSdeG sobre los Presupuestos de la Xunta

A Coruña

Los presupuestos de la Xunta de Galicia para 2026 protagonizaron esta semana el debate político en A Coruña Opina, el espacio de análisis de Hoy por Hoy A Coruña. Con las cuentas recién aprobadas por el Gobierno gallego e iniciando su recorrido parlamentario, tres diputados por la provincia —Roberto Rodríguez (PP), Iria Taibo (BNG) y Silvia Longueira (PSdeG)— analizaron qué impacto tendrán en la ciudad y su comarca.

El punto de partida fue claro: el Gobierno gallego presume del mayor presupuesto de la historia autonómica, mientras la oposición denuncia una baja ejecución y falta de transparencia en las partidas. “Tres de cada cuatro euros se destinan a sanidad, educación y políticas sociales”, subrayó Roberto Rodríguez. Taibo y Longueira, en cambio, coincidieron en que “el papel lo aguanta todo”, pero lo relevante es “cuánto se ejecuta realmente”.

Sanidad: el CHUAC, entre la promesa y el calendario

El debate arrancó con la sanidad, y más concretamente con las obras de ampliación del Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (CHUAC), una actuación que acumula retrasos y que, según el PP, se prolongará hasta 2031. Rodríguez defendió que “se trata de una obra compleja, con fases técnicas y administrativas”, y destacó que este año se invertirán 44 millones de euros, con otros 80 ya movilizados para la siguiente fase.

Desde la oposición, tanto BNG como PSdeG criticaron la situación como “una historia interminable”. Iria Taibo denunció que “el retraso es grave y afecta directamente a pacientes y profesionales”, mientras que Silvia Longueira recordó que “el grueso de la inversión se traslada a los últimos años de la década”, lo que a su juicio “demuestra que la prioridad real no es la sanidad pública”.

A la polémica se sumó el debate sobre los centros de salud de la comarca, con demandas específicas para Oleiros, Mera, Betanzos o Carral, donde los problemas de personal y de infraestructuras siguen sin solución. Rodríguez replicó que Galicia es “la única comunidad donde la educación es gratuita desde la escuela infantil hasta la universidad”, y que el Gobierno gallego “mantiene una apuesta firme por los servicios públicos”.

Vivienda: Xuxán y Monte Mero como prueba de fuego

El acceso a la vivienda fue otro de los temas más intensos del debate. El diputado popular defendió el compromiso del presidente Alfonso Rueda de duplicar el parque público gallego, pasando de 4.000 a 8.000 viviendas, con unas 3.000 ya en distintas fases. En A Coruña, explicó, “hay más de un centenar de viviendas en construcción en Xuxán, 204 programadas y suelos cedidos en Los Rosales y Rey Abdullah”.

La oposición se mostró escéptica. Taibo señaló que “la falta de ambición es evidente” y que “solo se consignan 80.000 euros para desarrollo de suelo en el área coruñesa”. Longueira añadió que “la ejecución de la Consellería de Vivienda apenas alcanza el 17% este año” y advirtió de “conflictos en cooperativas de Xuxán que podrían poner en riesgo fondos europeos”.

Ambas coincidieron en que la Xunta “repite anuncios año tras año sin resultados visibles”. También criticaron el modelo de convenios con empresas privadas para escuelas infantiles y viviendas sociales, que según Longueira “prioriza la gestión privada en lugar de reforzar el sistema público”.

Cultura: el enigma de la Orquesta Sinfónica de Galicia

La financiación cultural también generó debate. La diputada socialista confesó no haber encontrado en el documento presupuestario la partida destinada a la Orquesta Sinfónica de Galicia (OSG). “Ni yo ni mis compañeros fuimos capaces de localizarla”, señaló.

El popular Roberto Rodríguez respondió asegurando que “la Xunta mantiene una transferencia de 3,6 millones de euros al Consorcio de Promoción de la Música de A Coruña”, del que depende la Sinfónica, y reclamó que “el Estado también contribuya al sostenimiento de esta institución cultural”.

Movilidad y conexiones: una comarca atascada

Aunque el tiempo de antena fue limitado, el debate incluyó referencias a la movilidad. Iria Taibo apuntó que los embotellamientos diarios en los accesos a la ciudad reflejan la falta de planificación de la Xunta. Criticó el actual diseño de la Vía Ártabra, que considera pensado “para coches y no para la ciudadanía”, y pidió un modelo de movilidad “racional, sostenible y comarcal”.

El representante popular replicó que la Xunta “incrementa las bonificaciones en la Tarxeta Xente Nova y la Tarxeta Meus 65” y recordó que el Gobierno gallego “cumple con sus competencias” mientras “otras infraestructuras estatales como el Vial 18 o la cuarta ronda siguen pendientes”.

Cuentas, deuda y ejecución

El bloque económico cerró el programa con una discusión sobre la deuda pública y la ejecución presupuestaria. Longueira advirtió que Galicia “supera los 12.000 millones de deuda” y acusó al PP de convertir el presupuesto “en un documento que se anuncia pero no se cumple”. Taibo coincidió en esa idea y denunció la “opacidad” de los datos, con partidas “que se repiten sin ejecutarse”.

Rodríguez replicó que Galicia “mantiene estabilidad financiera” y que la condonación parcial de deuda promovida por el Estado “no beneficia a los gallegos, sino que premia a quienes gestionan peor”. Además, recordó que el presupuesto de 2026 “incluye 800 millones en rebajas fiscales para rentas medias y bajas”, con medidas específicas para familias, personas con ELA y afectados por incendios.

Un resumen de fondo: las cifras frente a la realidad

El debate en A Coruña Opina evidenció tres visiones sobre un mismo documento: para el Partido Popular, los presupuestos reflejan “compromiso, estabilidad y carácter social”; para BNG y PSdeG, son “un reflejo de inacción, opacidad y baja ejecución”.

Más allá de las cifras, la discusión giró en torno a una idea común: la necesidad de pasar del papel a la obra. Los próximos meses serán decisivos para comprobar si los grandes proyectos —la ampliación del CHUAC, la promoción de vivienda en Xuxán y Monte Mero, la financiación cultural o las conexiones comarcales— se convierten en realidades palpables o siguen siendo titulares de cada otoño presupuestario.