El día que Boban decidió colgar las botas en el Estadio Arlonagusia
El crack croata abandonó el Celta y el fútbol en un partido de Copa en Lemoa

Real Club Celta

Vigo
9 de octubre de 2001. Los poco más de 1.500 aficionados que se dieron cita en el Estadio Municipal Arlonagusia de Lemoa no eran conscientes de que iban a pasar a la historia del fútbol español, croata y europeo. Ese mismo día, en su modesto y vetusto estadio, una de las estrellas más sonadas del fútbol europeo de los años 90 iba a colgar las botas allí. Zvonimir Boban disputaría sus últimos minutos como jugador del Celta y como futbolista profesional en un partido de Copa ante un Tercera División. El Celta había logrado sorprender en ese mercado de verano con uno de los mejores fichajes de toda la Liga. Conseguía completar su centro del campo y su ataque con uno de los mejores jugadores croatas de la historia. Boban llegaba del Milan, con el que había conseguido cuatro Scudettos, una Champions, dos Supercopas de Italia y una Supercopa de Europa. El hombre que había hecho campeón del mundo sub-20 a Croacia en 1987 y el talento que había liderado a la Croacia tercera del Mundial de Francia 1998.
Con ese palmarés espectacular llegaba a Vigo un fichaje más que ilusionante cedido por el Milán. La llegada de Alberto Zaccheroni le había limitado sus minutos de juego y el croata se interesó por la opción del Celta. Le había llamado la atención su fútbol y la propuesta planteada por Víctor Fernández. La cosa no pudo comenzar mejor con un gol nada más llegar en un amistoso contra Olympiakos. En Liga debutó en el minuto 64 de la primera jornada. El público de El Sadar no paraba de pedirle autógrafos al crack croata cuando saltó a calentar en la segunda parte.
El Celta ganaba 0-1 y Edu Domínguez, preparador físico del Celta, le llamó en el 64. Salía al campo por Vagner y comenzó a dejar pinceladas de su calidad. El Celta marca el 0-2 en un córner y asistió a Jesuli para el 0-3. Primera asistencia de Boban con la camiseta del Celta. En la segunda jornada, contra el Tenerife en Balaídos, jugó los primeros 45 minutos de un partido que el Celta fue capaz de ganar 3-0 al cuadro chicharrero. Fue la primera vez que pudimos ver juntos a Boban y Mostovoi. Les acompañaron Luccin, Gustavo López, Jesuli y Catanha. Con Boban en el campo, el Celta llegó 2-0 al descanso. En la segunda parte, sin el croata, los de Víctor marcarían un gol más.
Contra la Real Sociedad en Anoeta se quedó sin jugar un minuto y ahí ya comenzó el cabreo del jugador croata. Contra el Mallorca vuelve a ser suplente y no sale hasta el minuto 69. Solamente 21 minutos por delante y el equipo vuelve a marcar con el croata en el campo. El Celta ganó 2-0. No va convocado contra el Deportivo porque tiene compromiso con Croacia y llega su segunda titularidad en Liga. Fue contra el Valencia de Rafa Benítez, a la postre ganador del campeonato. Se había adelantado el cuadro ché con un gol de Juan Sánchez hasta que Maurice empató el partido tras una espectacular asistencia del croata. Un centro con el exterior de su pierna derecha desde la izquierda que caza el delantero marsellés. Su segunda asistencia con la camiseta del Celta. En ese partido no estaban Mostovoi y Karpin.
Y ahí se siguió torciendo la cosa. Una estrella mundial que había venido para jugar y que apenas lo hacía. Sí tuvo dos partidos con continuidad en la UEFA contra el Sigma Olomouc en Balaídos y en República Checa, en la primera eliminatoria que superó a finales de septiembre el equipo.
Pero la situación se complicó a principios de octubre. Tenía el Celta una doble salida a Málaga, en Liga, y a Lemoa en Copa del Rey. En Málaga, con Karpin ya recuperado de lesión, Víctor Fernández optó por no darle ni un minuto a Boban, que se dedicó a firmar autógrafos en la banda de La Rosaleda mientras calentaba. El equipo celeste logró un empate a dos goles antes del partido de Copa. El Celta viajó de Málaga a Bilbao para concentrarse allí antes de ir a jugar a Lemoa en Copa del Rey. Allí Boban, ya molesto por la ausencia de minutos en Málaga, se olía que podría ser titular en la Copa ante un Tercera División en un estadio pequeño. El Arlonagusia solamente tiene una grada, una capacidad para 1.500 aficionados y, el resto de las tres otras zonas, contaba, por aquel entonces, con una barandilla metálica casi pegada a la línea de cal. Enterado del rival, Boban habló con el segundo de Víctor Fernández, Moncho Carnero, para exponerle su decepción y su preocupación por la falta de minutos. Ya dejó en el hotel de Bilbao abierta la puerta a su marcha, como así fue. Lo único, Carnero sacó el compromiso de Boban de jugar los minutos que le pidiese el entrenador aragonés en el choque contra la SD. Lemona.
El Celta estuvo a punto de sufrir en sus carnes un “copazo” en toda regla. Con un once formado por Pinto, Velasco, Cáceres, Sergio, Coira; Silvinho, Doriva, Luccin y Edú, Maurice y McCarthy, los celestes hicieron una primera parte horrible. Tal era el desaguisado que, a los 17 minutos, el Lemona ya ganaba 2-0 con dos tantos de Rubén Ruíz. En la segunda parte, con las salidas de Karpin y Catanha, el equipo tuvo algo más de profundidad. En el minuto 71 Doriva ponía el 2-1. El Celta puso cerco a la portería rival, pero no fue hasta el minuto 85 cuando Catanha puso el 2-2. Había que jugar una prórroga ante un modestísimo rival que había sido mejor que los celestes. Nada más comenzar el tiempo extra, Edú ponía el 2-3. Ya llovía menos. Pero todavía faltaba el momento para la historia. En el minuto 105 de partido, Víctor Fernández decide sacar a Boban al campo. Cumplió su palabra con Moncho Carnero, salió a jugar, pero lo hizo con cara de pocos amigos. La expulsión de Sergio Fernández dos minutos después obligó a los celestes a jugar replegados y defendiéndose de los ataques de una animosa SD. Lemona. Fueron seguramente los 15 minutos más tristes de la carrera de Zvonimir Boban.
En aquella noche copera en Euskadi se había puesto punto y final a la trayectoria de uno de los mejores futbolistas europeos de los 90. Al llegar a Vigo habló con Horacio Gómez y, no solamente decidió dejar el Celta; también decidió colgar las botas. Zvonimir Boban se retiró del fútbol en el Estadio Municipal Arlonagusia de Lemoa. Aquel 09 de octubre de 2001 pasará a la historia por haber sido el punto y final a lo que pudo haber sido y no fue. Siempre quedará la duda y la pregunta en el aire de si eran compatibles Boban y Mostovoi. La pena fue no poder verlo. El Celta pudo tener un ataque único con Boban, Mostovoi, Karpin, Gustavo López y Catanha, pero no lo usó demasiado.
Yo viví en Lemoa, yo viví en el Arlonagusia, un partido para la historia del Celta, del fútbol croata, español e italiano. El prematuro adiós de Boban.

Jacobo Buceta
Periodista de Radio Vigo-Cadena Ser desde 1998. Director de Hoy por Hoy Vigo desde 2008 y narrador de...




