¿Te sientes menos activo con la llegada del invierno? Así influye el cambio de estación en nuestro ánimo

Lugo

Con la llegada del invierno y del frío o la lluvia, cada vez salimos menos de casa. En verano pasamos, o lo intentamos, buena parte del día en el exterior, es más sencillo hacer planes y tenemos rutinas más activas. Sin embargo, los cambios estacionales van menguando este dinamismo, y el descenso de la actividad puede venir acompañado de una sensación de desánimo o tristeza, que se relaciona con el cambio del tiempo.

Según la psicología, puede llegar a ser patológico y se conoce como trastorno afectivo estacional. "A todos nos pasa, o a la mayoría, que cuando llega el mal tiempo no nos apetece hacer planes, o que nos ponemos más tristes, nos da la bajona", comenta la psicóloga Marta Meijide.

¿Qué implica un trastorno afectivo estacional? Que "cuando hay cambios de estación, sobre todo de otoño a invierno, aparecen síntomas de depresión patológicos o se agravan si ya existen". Es "realmente una enfermedad", aclara, "una patología".

Alteración de los ritmos circadianos

La meteorología condiciona nuestros ritmos de vida y, si llueve, "hacemos menos planes". Además, también "disminuyen las horas de sol", y esto influye en "los ritmos circadianos". "Al haber menos luz, ese reloj biológico que tenemos en nuestro cuerpo se ve afectado, y esto se nota también en cuestiones como nuestro estado de ánimo o en el apetito", detalla.

Por este motivo, una terapias que se aplica en algunos casos es la "fototerapia". "La falta de luz es una de las principales causas que provocan estos trastornos", y por eso lo que se hace es "exponer a la persona a una lámpara artificial de unos 100.000 lux, o sea, muy potente". Permanece próxima a esta iluminación que "simula la luz solar", entre treinta y veinte minutos.

Según asegura Meijide, es un tratamiento "muy efectivo" en algunos casos, aunque a menudo suele acompañarse de otro tratamiento farmacológico.

Patrones estacionales

Los síntomas de estas patologías estacionales coinciden con los de una depresión o un trastorno bipolar habitual, que pueden ser "cambios en el apetito, en el sueño, falta de energía o tristeza recurrente". Se hace necesario recurrir a ayuda profesional cuando "todo esto adquiere una gravedad que te limita en tu día a día, en tu trabajo o en tus relaciones".

La diferencia que se marca al añadir la etiqueta de "estacional" significa que se ha detectado un patrón vinculado al cambio de tiempo. Se incorpora cuando se detecta que los síntomas "aparecen recurrentemente al pasar de otoño a invierno, o cuando los síntomas se agravan en esta época del año".

Consejos para sobrellevarlo

Ante estos cambios emocionales que trae consigo la llegada del frío y de las lluvias, la psicóloga recomienda, en caso de casos más graves, pedir ayuda profesional. Sin embargo, para ese desánimo que no llega a ser patológico, pero que puede llegar a ser frustrante o provocar tristeza, aconseja "intentar buscar otros planes, que aunque no sean al aire libre o en el exterior, te hagan sentir bien".

Es útil también buscar "una rutina que nos permita seguir motivados" o probar a encontrar nuevas afecciones. Además, es clave "tener presente que es un ciclo, y que el verano vuelve".