Caballero exige la dimisión de la Conselleira mientras la Xunta asume por urgencia las obras de la Presa de Eiras

La Xunta de Galicia ha asumido en solitario y por la vía de urgencia las obras para la sustitución de las dos válvulas dañadas del embalse de Eiras. La decisión, anunciada este jueves por la conselleira de Medio Ambiente e Cambio Climático, Ángeles Vázquez, ha exacerbado la tensión con el alcalde de Vigo, el socialista Abel Caballero, quien ha respondido pidiendo la dimisión de la conselleira.

Obras de urgencia y calendario incierto

La actuación de emergencia, encargada por Augas de Galicia a una ingeniería y una empresa especializada, comenzará con la realización de un bypass para permitir que el agua pase directamente del embalse a la canalización, evitando las válvulas en mal estado. Posteriormente, se instalarán válvulas provisionales mientras se encargan las definitivas.

La conselleira Vázquez justificó la intervención de la Xunta ante la gravedad de la situación, señalando que "no se puede permitir que más de 400.000 personas [...] puedan correr el riesgo de quedarse sin agua".

Vázquez advirtió, sin embargo, que los trabajos serán complejos y no se desarrollarán con rapidez. "No va a ser un trabajo que se desarrolle en una, dos, tres, ni cuatro semanas, va a ser un trabajo más largo", precisó.

Responsabilidades y coste

Mientras la Xunta asume la ejecución y financiación inicial de la obra, que se estima en 2 millones de euros, insiste en que la manipulación y el mantenimiento de las válvulas correspondían a la concesionaria del Concello.

"Nosotros damos el paso y, por supuesto, asumimos la obra porque encargamos la obra, la financiamos, pero eso no quiere decir que no se pida la responsabilidad pertinente," insistió Ángeles Vázquez, señalando a la concesionaria Aqualia por, supuestamente, no informar a Augas de Galicia de la problemática.

Por su parte, el alcalde Abel Caballero pidió la "dimisión" de la conselleira, acusándola de "mentiras y engaños". Caballero sostuvo que la Xunta "hace ocho meses" que conocía el problema de las válvulas y se preguntó "a qué esperó" para actuar.

Además, el alcalde argumentó que el coste de la reparación ya está cubierto, puesto que el Concello "desembolsa anualmente 600 mil euros para el mantenimiento de la presa".

Fugas del 50%

La conselleira también recriminó a Vigo no notificar las pérdidas de agua en sus canalizaciones, algo que considera "obligatorio por ley", y citó zonas con "pérdidas superiores al 50%".

Para Ángeles Vázquez, esta crisis subraya la necesidad de "dar un paso en firme y crear una mancomunidad" para la gestión del agua. Descartó, en este momento, la construcción de un nuevo embalse que reclama el alcalde de Vigo.

La Xunta ha asegurado que, una vez garantizado el suministro, se dirimirán las responsabilidades por el estado de las válvulas. Por ahora, la prioridad es evitar que el área metropolitana de Vigo se quede "sin agua", un riesgo que, según la conselleira, podría llevar a afrontar la Navidad con restricciones.