Galicia, una escuela: 50 años de arquitectura en A Coruña

A Coruña

Hasta el 11 de enero, la sala de exposiciones de Palexco acoge Galicia é unha escola, una muestra que rinde homenaje a todos los docentes y estudiantes que han pasado por la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universidad de A Coruña (ETSAC) desde 1975 hasta hoy. Medio siglo de historia condensado en un recorrido por el impacto cultural, social y urbano que la escuela ha ejercido dentro y fuera de Galicia.

El director de la ETSAC, Miguel Abelleira, explica que esta exposición no solo revisa el pasado: “Queríamos mostrar qué ha hecho la escuela por Galicia”, afirma. Y lo hace desde una mirada amplia, plural y profundamente contemporánea.

Una muestra que pone en valor el impacto de la escuela

La ETSAC, única escuela pública de arquitectura del noroeste español, ha formado a más de 5.000 arquitectos a lo largo de cinco décadas. Su director, Miguel Avelleira, destaca que la exposición busca mostrar qué ha aportado la escuela a la comunidad, no solo a través de edificios emblemáticos, sino mediante actuaciones muy diversas desarrolladas por sus egresados.

El visitante encontrará ejemplos de intervenciones en espacio público, proyectos de difusión cultural, diseño gráfico y de producto, además de obra construida. También aparecen trabajos que conciben la arquitectura como herramienta de equilibrio social o como motor de responsabilidad política y urbana. La exposición refleja la amplitud de miradas que caracteriza a los profesionales formados en la escuela.

Una forma gallega de entender la arquitectura

Aunque rehúye etiquetas, Avelleira reconoce que existe una actitud común entre quienes han pasado por la ETSAC. No se trata de una estética concreta, sino de una manera de aproximarse al lugar en el que se interviene. Respeto por el territorio, diálogo con lo preexistente y una combinación equilibrada entre tradición y contemporaneidad son señas de identidad que se repiten generación tras generación.

En la escuela se enseña desde el primer curso que toda intervención debe mejorar el entorno. Si un proyecto lo empeora, señala Avelleira, es que se ha hecho mal. Esta filosofía impregna la formación y se refleja en los trabajos que se muestran en la exposición.

La arquitectura como cultura ciudadana

La ETSAC apuesta por reforzar la presencia de la arquitectura en la sociedad gallega. La colaboración con instituciones públicas, la celebración de la Semana de la Arquitectura o la organización de actividades divulgativas buscan que la ciudadanía conozca y valore la calidad arquitectónica que la rodea. Una sociedad formada e informada, afirma Avelleira, está en mejores condiciones para exigir espacios urbanos de calidad.

El reto urbano de los muelles de A Coruña

Uno de los grandes debates actuales es el futuro de los terrenos portuarios que quedarán liberados de actividad. Avelleira considera que se trata de una oportunidad histórica que la ciudad no debe desaprovechar. La relación entre la ciudad y el puerto debe ser continua, sin rupturas. El puerto es ciudad y la ciudad es puerto.

Entre los criterios esenciales para intervenir, el director de la ETSAC destaca tres: mantener una relación fluida entre ambos ámbitos, controlar la densidad y la escala para asegurar un diálogo respetuoso con la ciudad existente, y plantear una propuesta valiente pero realista, capaz de hacer que la ciudad gane con el resultado final.

Desafíos de la escuela para los próximos años

La ETSAC afronta un futuro marcado por la colaboración con administraciones y empresas, la difusión cultural de la arquitectura y la adaptación a la presencia creciente de la inteligencia artificial. Avelleira considera que estas herramientas podrán asumir tareas mecánicas, pero insiste en que la esencia del proyecto arquitectónico nace del diálogo humano. La sensibilidad, la intuición y la emoción no pueden automatizarse.

Un legado vivo que sigue construyendo Galicia

Galicia, una escuela celebra 50 años de arquitectura gallega y reivindica el impacto de una institución que ha formado a miles de profesionales comprometidos con el territorio. La exposición es, al mismo tiempo, un homenaje, una reflexión y una invitación a imaginar el futuro urbano de Galicia.